Tratamientos naturales para la Conjuntivitis
La Conjuntivitis, conocida también como enrojecimiento de los ojos, es el término clínico que describe la inflamación o infección de la fina membrana llamada conjuntiva, que cubre el ojo y el interior de los párpados.
Cuando la conjuntiva se irrita, los diminutos vasos sanguíneos que la componen se dilatan para expulsar las sustancias tóxicas y traer anticuerpos protectores a la superficie del ojo. Debido a esto último el ojo se torna rojo o rosado debido a la inflamación y la irrigación circundante de esta capa del ojo.
Esta inflamación puede deberse a infecciones bacterianas, virales, reacciones alérgicas, irritación por productos extraños, entre otras causas.
Para prevenir esta situación muy molesta, se aconseja: tratar de no tocar objetos que hayan sido utilizado por una persona con Conjuntivitis, utilizar vitaminas A, C y E, no exponerse al agua de la piscina, si se tiene tendencia a padecer Conjuntivitis o llevar lentes ajustados para nadar, también es recomendable acudir al oftalmólogo ni bien aparecen las molestias oculares quien puede aplicar el tratamiento adecuado.
Mientras que se busca el tratamiento médico se pueden probar remedios caseros que alivian las molestias temporalmente y estos pueden ser: aplicación de compresas con té o pedazos de telas mojados en infusiones muy concentradas de Manzanilla o Hinojo, estas ayudaran a disminuir el ardor y la inflamación pero no actuaran sobre las bacterias que producen esta afección.
Otros tratamiento casero muy efectivo puede ser: la aplicación de una infusión con 20 gramos de flores de Saúco por cada medio litro de agua, esta se aplica, mediante unas bolas de algodón, varias veces a lo largo del día.
Y por último un potente agente contra la Conjuntivitis podemos realizarlo con una cucharada de Aciano y otra de Eufrasia en un vaso de agua hirviendo, al que se agregará una pizca de sal. A continuación, verter el contenido en un hervidor y poner en el fuego durante 10 minutos. Dejar enfriar y colar con una gasa y se puede practicar lavados oculares dos o tres veces al día.