Casi el 50 por ciento de los pacientes con diabetes tipo 2 dicen tener dolor agudo y crónico, y aproximadamente una cuarta parte sufre de una amplia gama de síntomas, incluyendo daño a los nervios, fatiga y depresión, según un nuevo estudio.
Como resultado de esto, el tratamiento especializado conocido como cuidados paliativos, que se centra en aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida, debe ser una parte normal del tratamiento de la diabetes, sugieren los investigadores.
Los adultos que viven con diabetes tipo 2 sufren de tasas muy altas de dolor y otros síntomas no dolorosos, en niveles similares a los pacientes que viven con el cáncer, según comentó la autora principal del estudio, la doctora Rebecca Sudore, médica de planta en el San Francisco VA Medical Center y profesora de medicina en la Universidad de California en San Francisco.
Los cuidados paliativos ya han comenzado a ser parte de la atención en pacientes con insuficiencia cardiaca, cáncer e insuficiencia renal. Pero los resultados del estudio también destacan la necesidad de ampliar la gestión de la diabetes hacia la inclusión de los cuidados paliativos.
El campo de la diabetes se ha centrado, y con razón, en la disminución del azúcar en sangre de los pacientes, la presión arterial y los niveles de colesterol en un intento de prevenir complicaciones tales como enfermedades cardiovasculares, insuficiencia renal, amputaciones y ceguera.
Sin embargo, estas observaciones proporcionan una importante llamada de atención para que los médicos no esperen hasta las últimas etapas de la diabetes para centrarse en los dolores informados por los pacientes, sino más bien considerar los cuidados paliativos tempranamente como parte de la gestión habitual de las enfermedades crónicas.