Tres cosas hay en el día..

...tabaco, ETA y Gabrielle Giffords de las que me gustaría comentar algo después del paréntesis navideño aquí en el Bósforo musulmán. Soy poco navideño.
Mucho se está hablando de la prohibición de fumar en lugares cerrados, locales de ocio, parques, colegios y demás. Aquí en Turquía se aplica desde hace mucho tiempo y siguen fumando un montón... No se yo de la eficacia. Igual tienen razón. Pero me mosquea. Cierto es que los fumadores -y ex fumadores, como el que suscribe- hemos estado abusando de nuestra libertad haciendo fumar a quien no lo merecía, pero en su casa cada uno debiera poder hacer lo que le venga en gana. Un bar es la casa de su dueño. Tiene reservado el derecho de admisión. Paga el alquiler. Sueldos. Paga sus impuestos. Muchos. Demasiados. Quien quiera que entre. Aviso en la puerta y santas pascuas. 
Yo hace tiempo que dejé de fumar. Prefiero que no se fume a mi alrededor... pero si no me dejan hacer lo que quiera en mi casa, en mi negocio, ¿qué será lo próximo? La inquisición. La ínclita Leire ya anuncia una ley en la que se tendrá que demostrar la inocencia ante una acusación de discriminación. Todos somos culpables hasta que se demuestre lo contrario. Como los fumadores. El acabose.
Acabemos con los coches, la calefacción y el aire acondicionado. Todo contamina. ¡No a la polución! Causa la muerte... Aunque, en última instancia, la causa de todas las muertes es la vida.
Por otro lado, al menos por un tiempo, los asesinos etarras han anunciado un alto el fuego. Yo diría que otra trampa más. Un quiero y no puedo presentarme a las elecciones. Nadie les cree. ¿Van a cesar las extorsiones? ¿Los robos? ¿Entregan las armas? No. Entonces, nada nuevo bajo el sol.
También en clave de sucesos quisiera echar unas líneas acerca del intento de asesinato de la congresista demócrata norteamericana Gabrielle Giffords. Lamentable suceso. Lamentable reacción la de la prensa. Queridos, se os ve el plumero. Tenemos una clase política de muy bajo perfil. Tenemos una clase mediática a juego. Y tenemos la culpa de que nos la cuelen todos los días. Por no pararnos a pensar un rato. Todo lo que dice la tele no es verdad. Todo lo que dice la prensa no es verdad. Sencillamente. 

El homicida

Ha corrido como la pólvora la creencia de que el magnicida es un sujeto de extrema derecha. Bueno. Según un amigo era un fumeta de porros izquierdista. Se sabe que leía Mi lucha, de Adolf Hitler y El manifiesto comunista, de Karl Marx. Pero NBC News ha dicho que es un fachorro anti-Obama y para qué buscar más. Los medios no tienen ni tiempo ni ganas de investigar, contrastar y corroborar. 
No sé lo que será el tipo, al margen de algo desequilibrado. Lo que está claro es que cuando rascas un poco bajo alguna noticia, hay demasiadas veces falsedades, imprecisiones, demagogias. Aunque, claro, si los medios no tienen ni tiempo ni ganas, menos los ciudadanos. Los ciudadanos lo que tenemos somos unas tragaderas como tunel grande sobre carretera.
P.D.1: Feliciano 2011 a todos.... Enhorabuena a los premiados
P.D.2.: Recomiendo la lectura de esta entrada del blog de Jorge Valin, acerca de lo bien que calan los mensajes de la prensa.