Revista Toros
Lo más cercano a la poesía en twitter se lo he leído hoy a mi compadre Chili. Ha dejado caer (sobre los militares de Cuadri): "esto de ver castaños será como ver un cometa" Y en el acto, es lo que tienen las metáforas, se ha materializado la afición tras un telescopio, vestidos de copernicanas maneras, buscando en el cielo astros, meteoritos y bravura, cometas y torería. De repente, todo ha cambiado. Un resquemor recordatorio por todo el pellejo. En el ruedo se mira hacía abajo y hacía dentro, como en Padova y, si no me viene mal recuerdo a la memoria, en este tendido somos mucho más del gran Vesalio. Por eso Chili, y también en homenaje a esa memorable sesión de tarde con más humo que en el Madison Square Garden de los 40 viendo en el ring Días de Cine, he pensado, y creo que estarás de acuerdo conmigo, que para un buen aficionado, ver un colorao de Cuadri bravo, será parecido a ese momento de Inseparables (Dead Ringers, Cronemberg), cuando a nuestra entrañable pareja de hermanos gemelos ginecólogos, interpretados magistralmente por Jeremy Irons, se les aparece dentro de la chica castaña esa sagrada mutación que es un utero de tres entradas. (al caballo).
Se te echa de menos, un abrazo.
Foto de familia: Chili y yo con una castaña de Cuadri.
Arriba, instrumental y faena...