Tres libros de poesía. Palabras de demora del granadino José Julio Cabanillas, Feu de Erratas de Abel Feu, onubense, y Ardua mediocritas, la segunda colección de versos de Enrique García-Máiquez. Los tres están bien. El primero es un libro íntimo y personal con recuerdos, balances y un tono sensible, clásico y elegante. En el segundo también pesa lo autobiográfico (infancia, primer amor, la madre, el colegio, lo que se experimenta con la derrota) y el tono de confidencia se percibe aún con más fuerza. El tercero es más variado y festivo: gente que le interesa, momentos, la propia biografía (la madre, el amor). Buen muestrario del ingenio y fertilidad ya conocidos en el autor.
A este tipo de libros, en los que soy poco experto, me acerco siempre con un cierto pudor, con la sensación de traspasar una puerta de intimidad que no se percibe en otro tipo de obras. Me parecen textos muy personales que, por una razón que ellos conocen, quieren compartir con cualquiera que compre los tomitos.