Trilogía "Cincuenta Sombras de Grey"

Hola
Hoy os hablo de la trilogía de "Cincuenta sombras de Grey", de E.L. James. No podía dejar pasar este post en el blog, y es que os confieso que el impulso creador del blog partió precisamente estas novelas.
Os explico: mi amiga María tiene un blog, A partir de los treinta, es amante de la lectura también y compartimos muchísimas opiniones sobre libros. Cuando me leí " Cincuenta sombras de Grey" y sus libros posteriores, quedé tan decepcionada que no paraba de quejarme, se me llevaban los demonios, así que fue ella la que me dijo que estaría bien crear un blog y así volcar al mundo mi opinión sobre los libros. Así empezó todo.
Os advierto que no voy a hacer la reseña típica en la que hablo de la autora, resumo las obras etc, porque parto de la base de que la mayoría de la gente entenderá de lo que hablo, ya que las novelas de Grey han pegado tan fuerte que hasta los que no se han leído los libros saben de qué van. Es más, ni siquiera haré distinción de las 3 novelas porque mi opinión se puede aplicar a todas ellas a la vez.
Bueno, allá voy, siempre destacando que se trata de mi opinión totalmente personal y que respeto todas las opiniones y gustos diferentes a los míos.
La trilogía 50 sombras de Grey me ha parecido...¿cómo lo diría? ...¡una tomadura de pelo!. ¡Eso es! Siento dejarme guiar por mis pasiones pero este post está saliendo así y así se queda.
"Lo más" que resultó ser "Lo menos"
Cuando comencé con el primer libro me lo habían recomendado como "lo más" y ya iba sobre el aviso de que era de contenido erótico. Hasta ahí todo bien, lo que no me esperaba es que de las 700 páginas de cada libro, 600 hablarán de sexo, y aquí es cuando se aplica el refranero popular de "lo poco gusta y lo mucho cansa", así que agotada quedé de leer todo el rato sobre el mismo tema. Ni el primer libro ni los posteriores lograron engancharme en ningún momento, partiendo de la base de que leyendo las primeras 50 páginas del primer libro, si eres una lectora asidua, sabes de sobra como va a acabar la historia.

Por sí hay algún despistado o despistada diré simplemente que el resumen general de la trilogía sería algo así como: chico guapísimo (pero a rabiar) multimillonario y con pasado oscuro se enamora de la típica niña mona pero insegura y sin personalidad en la que nadie se fija nunca (añado que eso es lo que nos vende la autora pero luego resulta que Anastasia, la protagonista, lleva a todos los personajes masculinos del libro detrás de ella, todo muy creíble). Como os decía, esta es la idea general, ahora sólo tenéis que añadir un montón de sexo, pero no el habitual, sino un poquito más bondage en el que se utilizan cuerdas, esposas, bolas chinas y cientos de aparatos varios mediante los cuales el amo, en este caso el señor Grey, somete a la sumisa Anastasia, - valga la redundancia- y con contrato de sumisión de por medio y todo. Hale, fin de la historia. Aderezadlo también con dosis de intriga sobre el pasado de Grey (que de misterio no tiene nada porque ya os he dicho que es muy muy previsible todo) y en el último libro si eso le ponéis también algo de acción, así, sin venir a cuento.

Sinceramente para lo superficial de la historia, con un libro habría bastado. Los protagonistas son además totalmente planos y reiterativos hasta límites insospechados. Sus jornadas de 24 horas se resumen en levantarse y tener sexo, ir a trabajar y mandarse decenas de emails subidos de tono (vamos, que trabajar poquito), ir a casa a comer y volver a tener sexo, luego por la tarde más sexo, irse a dormir y despertarse a  las 4 de la mañana y volver a tener sexo, volver a dormir hasta las 8 y volver a empezar otra jornada exactamente igual que la anterior.- Que digo yo, si ese ritmo fuera normal estarían los pobres consumidos, ¿no?
Reiteración narrativa hasta la saciedad
Por otro lado, si nos centramos en el estilo de la autora, creo que de todos los libros que me he leído estos son sin duda los que peor escritos están. La diosa que lleva dentro Anastasia (los que han leído las novelas saben a que me refiero) creo que es el alter ego mas odioso con el que me he encontrado nunca- el señor Freud se habría frotado las manos si hubiera encontrado un caso como este en su época-  Una vez finalizados los libros estoy en condiciones de decir que no puedo soportar ni una voltereta más y ni un tiro con jabalina más del subconsciente de la protagonista femenina. Si además nos fijamos, tal y como leí en una reseña sobre los libros hace poco, la chica en cuestión está llena de tics extraños, que si ojos en blanco, que si  mordedura constante de labios y un largo etc.
Por su parte, Christian Grey es mandón, posesivo, controlador y un millón de adjetivos calificativos negativos más- todo un primor al que todas adoraríamos, claro-. Controla los movimientos de Anastasia (hasta sus cuentas bancarias) le compra la ropa y así de paso decide que se pone la muchacha, y en cuanto Anastasia no da señales de vida (aunque sea porque está en el cuarto de baño) mueve cielo y tierra para localizarla o se planta directamente en su trabajo. Por sí esto no fuera poco, Grey le pone a Anastasia un miembro de su seguridad privada que no se despega de ella. No sé yo, pero un comportamiento así no debería fomentarse precisamente sino todo lo contrario (tantos años luchando por la igualdad de la mujer para que el 90% de la población femenina del planeta se sienta identificada con semejante protagonista femenina hueca, sin iniciativa ni ambición de ningún tipo, qué triste).
En realidad no sabría decir que es lo que me ha molestado de los libros de E.L James porque está claro que la historia que cuenta es ciencia ficción, pero como muchas de las novelas que me leo y me encantan. Podría ser el hecho de que miles de mujeres adoren esta historia habiendo novelas románticas muchísimo mejores, de las que te hacen sentir mariposas en el estómago, que pasan totalmente desapercibidas. ¡No lo puedo entender!
Además, lo que más me ha llamado la atención de estos libros es la gran contradicción que encierran, nos intentan vender la liberación sexual de la mujer a través de la sumisión - ¿ein? mi no entender-.
Una cosa tengo clara, la campaña de marketing de la trilogía es inmejorable, si sus creadores pretendían no dejar indiferente a nadie…¡enhorabuena! porque conmigo lo han conseguido
Finalizo con una cita que me dijo una amiga hace poco " leer es como comer, hay que comer… pero no cualquier cosa", ahí lo dejo.
Sólo recalcar que no pretendo ofender a nadie con mi opinión y que es sólo eso una opinión muy muy personal.
Besos
L.I.M.