Las que como yo tenéis el cabello rizado, ondulado o difícil de domar sabéis que los productos de fijación pueden ser grandes aliados entre ellos la espuma, pero también sabéis que si se usan a diario o cada vez que lavamos el cabello se pueden convertir en su enemigo, ya que estos productos tienden a resecar la fibra del cabello.
Antes de irme de vacaciones en agosto fui a la peluquería a cortarme un poco el pelo y la peluquera me pregunto si usaba espuma normalmente y le dije que sí, entonces me contó un truco que he estado usando hasta día de hoy y sin duda seguiré haciéndolo.
Me dijo que cada vez que lavara el cabello aplicara una mascarilla después del champú, quitara un poco de exceso, aclarando ligeramente o peinando para desenredar y la dejara hasta el siguiente lavado y claro esta sin usar espumas ni lacas después.
Si en alguna ocasión tengo que usar espuma, aplico la mascarilla la noche anterior, como os explicaba en el post mencionado antes.
El efecto de la mascarilla en el pelo es parecido al que se ve cuando se usa espuma u otro fijador ¡pero el cabello esta mucho más hidratado y protegido!
Como ya os he dicho es un truco que seguiré usando ¡mi pelo esta mejor que nunca!!
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