4. Entrantes con vegetales: El momento en el que se presentan los entrantes es siempre al principio de una comida (por lo general, en las cenas). Esta es la ocasión ideal para agregar diferentes vegetales (como zanahorias, tomates, pepinos, etc.) cortados en cubos o en rodajas. Pueden ser presentados en masas crocantes o canapés, acompañados por aderezos con poca grasa.
5. Ponerle nombre a los vegetales: Siguiendo el ejemplo de todos los vendedores y los agentes de promoción no hay nada mejor que cambiarles el nombre a los vegetales para hacerlos más apetitosos a ojos de los niños. Se pueden incorporar nombres de personajes famosos o de sus héroes preferidos.
6. Tener una noche vegetariana: Un día a la semana se puede servir en la mesa solo comida vegetariana. De esta manera los niños tendrán que comer —al menos ese día— diferentes platos con bastantes vegetales y un poco de legumbres (puedes darle hamburguesas vegetales con hongos, humus y otros patés y mayonesas vegetales).
7. Servirles jugos de frutas y verduras: Si a los niños les ofreces un jugo cuando tienen sed es muy probable que lo tomen más allá de su contenido. Los jugos vegetales ofrecen un enorme abanico de posibilidades que se adaptan a los gustos de todo tipo de niños.
8. Déjalos que jueguen con los aparatos: Los niños sienten una curiosidad natural por todo lo que incluya tecnología y máquinas eléctricas. Por esta razón es una buena idea dejarlos jugar (con nuestra supervisión) con máquinas como jugueras, procesadoras y licuadoras con la condición de que después comerán algo hecho en ellas.
9. Haz postres y tortas: Existen cientos de recetas dulces que incluyen zanahorias, zapallos, batatas y otros vegetales en preparaciones que pueden ser muy atractivas para los más pequeños. Lo mejor de las recetas dulces con vegetales es que se las puede acompañar con jugos de frutas.
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