“Make your body your machine”, haz de tu cuerpo tu máquina, o eso dice el eslogan (¿sabías que la palabra eslogan viene del gaélico sluagh-ghairm: grito de guerra?…bueno ya basta de divagar, al tajo) del TRX Suspension Training, un sistema de entrenamiento en suspensión que quizá ya hayas visto o probado en tu gimnasio, o incluso en algún grupo de entrenamiento en un parque de tu ciudad. Con este dispositivo el peso de tu cuerpo hace las funciones de las pesas de un gimnasio. Permite ejercitar tanto la fuerza, como la elasticidad o la resistencia de una forma variada y muy divertida.
Según cuentan este invento nació hace unos años entre los Navy SEALS de Estados Unidos. Randy Hetrick y sus compañeros necesitaban mantener una condición física idónea, sin embargo, la mayor parte de las veces no tenían acceso a equipo de entrenamiento o a un espacio adecuado. Por eso, improvisando con cinturones de paracaídas cosidos a mano fueron desarrollando este ingenioso dispositivo.
El kit TRX que podemos adquirir en la actualidad es precisamente eso, unas tiras resistentes que puedes colgar en cualquier parte, tanto en postes verticales como horizontales, que poseen unas asas en sus extremos donde agarrar con las manos o enganchar los pies. Sus ventajas son varias: se pueden realizar gran cantidad de ejercicios, se puede instalar en cualquier parte (techo, puertas, postes…) y presentan la dificultad de tener que sostener a nuestro cuerpo correctamente alineado todo el tiempo en una situación inestable, contribuyendo también al trabajo de propiocepción.
Es asombroso como con una herramienta tan simple puedes crear tanta variedad de entrenamientos, para el nivel y la disciplina que quieras. Puedes realizar clases de iniciación, o enfocadas más a la salud; trabajar hipertrofia, con series tradicionales, superseries, entrenamientos en pirámide; entrenamientos pliométricos, con más componente explosivo, saltos, etc.; o también utilizarlos como una herramienta más en los ahora tan conocidos HIIT (High Intensity Interval Training), entrenamientos en intervalos de alta intensidad.
La experiencia que tengo con esta herramienta es más que satisfactoria. Los TRX que usamos en nuestro centro de trabajo han aguantado prácticamente como el primer día todo tipo de clases, y si no me falla la memoria (lo cual es bastante normal) ya van para tres años.
De un tiempo a esta parte, se han añadido complementos nuevos, como el Rip Trainer, bastón con unos de sus extremos atado a una goma elástica, que a su vez va anclada a un punto fijo. Se trabaja bastante con movimientos de rotación, brazos, etc. Desgraciadamente no he tenido el gusto de probar todavía este invento.Aparte del tonito de teletienda que le ha quedado al post, espero haberte aclarado un poco las dudas que pudieras tener respecto al TRX, de todas formas si necesitas hacer cualquier consulta, comentar experiencias, etc. ya sabes, tienes los comentarios y la sucursal en Facebook.