TTHEO VAN GOGH Y TRAICIÓN A ERMUA. Hoy, hace 16 años. 6 de noviembre de 2005

Hace ahora un año que un islamista asesinó al director cinematográfico holandés Theo Van Gogh, y solo unos centenares de personas, aunque acompañadas por el primer ministro de su país y por el alcalde de Rótterdam, recordaron el hecho en la calle del crimen.
El resto de Holanda y numerosos intelectuales mantuvieron una actitud acobardada: cualquiera puede ser irreverente y profanar todo lo que es cristiano, pero está vedado, por corrección política y bajo amenaza de muerte, hacer lo mismo con lo mahometano.
Quienes denigran el cristianismo, generalmente fuerzas falsamente progresistas, se niegan a denunciar lo que de bárbaras tienen muchas costumbres musulmanas porque desean los votos de sus fieles: el islám, como las minorías regionales en España, ya influye políticamente en Europa, atemorizándola también, como estos días en París.
En su película Sumisión, como significa islam, Van Gogh exponía las humillaciones que sufren tantas mujeres musulmanas. El guión era de una exislámica somalí, Ayaan Hirsi Ali, hoy diputada liberal holandesa, amenazada de muerte por apóstata.
El fanático de origen marroquí, Mohamed Bouyeri, que degolló y apuñaló ritualmente a Van Gogh, le gritó hace unos días a la madre del cineasta que volvería a hacer lo mismo en nombre de Alá, y que se reía de su dolor porque era una infiel.
“No puede existir un país donde se haga libremente una película así”, gritó, además, recordando el filme de Van Gogh.
Y es cierto: corremos peligro de perder la libertad de creación, de información y de opinión. Tanto, que numerosas fuerzas políticas y económicas han obstaculizado la distribución internacional de Sumisión. Por miedo, o para complacer a los islamistas.
Mohamed Bouyeri fue condenado a cadena perpetua, pero tras él hay muchos más soldados de la yihad, la guerra santa.

TRAICIÓN A ERMUA

Veinte mil o quizás cuarenta mil ciudadanos de toda ideología democrática, y no diez mil como se dice oficialmente, junto con representantes del Foro Ermua y dirigentes del PP estuvieron este sábado a la mañana en la Puerta del Sol madrileña en una concentración en la que se advertía que la igualdad y solidaridad de todos los españoles solo puede existir con una España unida por la Constitución.
En el acto no había representación alguna del PSOE, aunque sí seguramente millares de votantes de ese partido que quizás nunca volverán a depositar la misma papeleta.
Y no estaba el actual PSOE por ese apego de los organizadores a la Constitución. Como ésta falle, la mayoría de los demócratas del País Vasco corre peligro de ser más perseguida aún, cuando no más asesinada.
Porque la Constitución es el único documento que garantiza su dignidad. Y como se desvirtúe o destruya, como hará con ella el nuevo Estatuto catalán que patrocina Rodríguez Zapatero, los vascos demócratas que no se humillen ante las fuerzas egoístas y premodernas de los nacionalismos serán las primeras víctimas.
¡Qué traición esa ausencia del PSOE, para hacer que el PP se quede solo!.
Este PSOE parece que no calcula que está arrojando en brazos de los populares a lo mejor, más honesto y limpio de los socialistas: a quienes no viven de la política.
La cuestión es que el PP, excesivamente beatón y ocasionalmente antiguo, sepa ser atractivo para esa gente que lleva décadas sosteniendo a la izquierda y que no sabría como cambiar el sufragio, como no fuera votando en blanco, como propugna el blog (http://www.wmaker.net/votoenblanco), creado por Francisco Rubiales, izquierdista desengañado que sigue románticamente apegado a esa ideología y desarrollándola para la modernidad, pero denunciando a quienes la han secuestrado.
Foro Ermua, no debe olvidarse, es una organización cívica que nació como grito de justicia y racionalismo tras el brutal asesinato, el 12 de julio de 1997, del rehén de ETA Miguel Ángel Blanco, un joven alegre, inteligente y trabajador que era concejal popular de Ermua.
La derecha, aunque el actual PSOE se niegue a reconocerlo, tiene mucha gente así, y el PSOE va a ir quedándose sin sus contrapartes igualmente brillantes como continúe bajo la dirigencia actual. Porque la gente joven es idealista y poco calculadora, y quien manda ahora en España tiene la supuesta listura de los aventureros osados, ignorantes y, además, maliciosos.
Foro Ermua nació en tiempos en los que PP y PSOE sufrían juntos el terrible acoso de los terroristas y de sus aliados. Fue una respuesta de militantes de ambos partidos y de demócratas independientes con una actitud humanística, cultural y ciudadana frente a ese terror que hundía en el silencio a las víctimas.
Entre los fundadores estaban figuras vascas bien conocidas, como Vidal de Nicolás, Agustín Ibarrola, José Luis López de Lacalle, Carlos Totorika, Jon Juaristi, Mikel Azurmendi, Francisco Doñate, Iñaki Ezquerra, Edurne Uriarte, Fernando Savater, Cristina Cuesta, Javier Corcuera, Raul Guerra y Txema Portillo.
Pero este PSOE que dirige José Luís Rodríguez Zapatero y el Gobierno que preside, deslumbrados por las dudosas posibilidades que dice tener de que los terroristas dejen de asesinar, sometió a las organizaciones como el Foro al silencio administrativo y político, al engaño, a la intimidación, a la ocultación y a la traición.
Este presidente está quitándose de encima a quienes le molestan para su desmantelamiento constitucional. Son sus michelines, como le llamó Arzalluz a los nacionalistas demócratas que no querían seguir su ruta soberanista.
Este Gobierno quiere recoger también las nueces que tira ETA agitando el árbol y que el mismo Arzalluz decía que le correspondían al PNV: a ver quien se queda con ellas.