
¡Hola lectores!
Parece que ahora se ha puesto de moda contar como ha sido tu vida en lo que a libros se refiere, y después de leer muchas entradas hablando sobre esto -que me encantan- me dije: ¡pues yo también quiero!
Podríamos decir que soy una de esas lectoras que “nació con un libro en la mano”. A ver, igual no tan exagerado, pero desde siempre me recuerdo leyendo, primero cuentos infantiles y luego ya libros más adultos, y es que hubo un factor muy importante que determinó que desde pequeña me interesara la literatura. Y es que en mi casa todos leían. Mi padre, mi madre y mi hermana –pero sobre todo mi padre- eran lectores empedernidos, así que, ¿cómo no iba a desarrollar yo el amor por la lectura?

Pero sin duda quien me metió realmente en el mundo de la literatura, o por lo menos la literatura un poco más adulta o juvenil, fue Laura Gallego. En serio, adoraba a esta escritora de pequeña. No me cansaba de leer sus títulos, me fascinaban sus mundos fantásticos –ahí fue cuando empecé a enamorarme de la fantasía – y me inspiraba para crear mis propias historias. Sin duda, Memorias de Idhún fue el libro de mi infancia y mi adolescencia. Pero también tengo que concederle mucho crédito a Cornelia Funke, mi otra gran escritora de fantasía (bueno, y de todo lo demás también). MDI y Corazón de tinta han sido unos de los pocos libros que he releído muchísimas veces a lo largo de mi vida, desde que los descubrí allá en primaria y durante la secundaria. También tengo que mencionar la saga de Fairy Oak y Ulysses Moore, ¡cómo olvidarlos! Y no, Harry Potter no está entre los libros que marcaron mi vida, de hecho los leí siendo ya bastante mayorcita xD
Desde entonces he cambiado mucho como lectora, sobre todo desde que descubrí blogger y mi mundo literario creció de una manera increíble, conocí más títulos y autores de los que nunca pensé que podrían existir. Me animé con los clásicos, en un reto que hice allá en el 2015-2016, y desde entonces no he dejado de leerlos. Me animé a leer en inglés también a raíz de un reto, y me alegro mucho haber probado y haber superado esa barrera, porque me ha venido de perlas. Descubrí muchísimos géneros que no sabía que me gustaban. Durante años dejé un poco de lado la fantasía, porque leía libros juveniles o distopías –que no digo que todas sean malas, ni mucho menos- y me llevé una decepción tras otra que me hizo cogerle un poco de tirria al género, hasta que hace poco me puse a investigar más a fondo y me di cuenta que hasta ese momento ni siquiera había rozado la superficie de la fantasía.
En fin, creo que hacerme un blog y poder compartir esta pasión con muchas otras personas fue un punto clave en mi vida como lectora. Desde entonces, nada ha vuelto a ser igual -y lo digo para bien jaja-. Espero seguir por aquí muchos años y seguir leyendo, hablando y escribiendo sobre libros.

