¿Tu blog no tiene tráfico?

¿Tu Blog no tiene tráfico?, ¿La desesperación se apodera de ti?, ¿Observas las estadísticas y ni los rastreadores de Google te hacen una visita? Entonces no tienes un problema, lo que tienes es impaciencia querido compañero/a.

Tu Blog no tiene tráfico porque posiblemente aun no haya tenido tiempo para que éste se haya asentado en la red, por lo que te invito a que no desistas, sigue generando contenido y difundiéndolo en las redes sociales, o a viva voz en medio de la calle de tu barrio, verás cómo poco a poco van llegando los seguidores.

Ahora bien, hay situaciones en las que no llegan las visitas y la paciencia no es el remedio. Vamos a hablar un poco sobre ellas y cómo solucionar cualquier error que puedas estar cometiendo en tu Blog. Recuerda que no tengo el doctorado Blogging de algunos, por lo que, en esta ocasión los consejos te los ofrecerá mi experiencia y el poco sentido común que todavía mantengo J

Tu Blog no tiene tráfico porque no te gusta escribir

Si estás escribiendo textos sin ilusión, lo más probable es que la indiferencia y monotonía por hacer algo que realmente no te gusta se hayan apoderado de ti.

Un texto tiene que llamar y gustar. Ha de invitar a tus lectores a que sigan leyendo, bien aportándoles información que les interese o bien porque merece la pena el simple hecho de disfrutar con tus palabras. Si tú mismo lo estás leyendo y se te cierran los ojos de aburrimiento, no esperes que los demás hagan el esfuerzo de digerirlo mejor.

Tu Blog no tiene tráfico porque la calidad de tus contenidos es mala

Ahora imagina que sí te apasiona redactar contenidos, que te encanta poner la maquinaria en funcionamiento pero siguen sin salir contenidos atractivos. Lo sé, es frustrante, pero debes asumirlo. Quizá la función de la redacción de los textos no sea para ti. A mí no se me da bien hablar en público, y no saldría en un vídeo de YouTube. Además, soy muy feo y la cámara se asusta, al igual que harían los seguidores.

Para remediarlo solo tienes que delegar esta tarea en alguien que sí tenga habilidades en la redacción. Hay una cantidad de escritores esperando tu llamada, que llegarían en fila hasta la Luna. Eso sí, asegúrate de que emplean el lenguaje y el tono que tú buscas, ya que dentro de esta gran variedad, hay cada paquete que asusta.

Tu Blog no tiene tráfico porque copias contenidos

Lo que marca la diferencia del tío que tiene un blog enfrente tuya es la calidad. Y esta calidad se consigue a través de la originalidad. Si no hay algo diferente, llamativo e interesante en lo que haces, ¿Por qué tendrían que interesarse por ti?

La copia de contenidos es un mal muy extendido, y aunque existen herramientas que permiten detectar este tipo de fraudes, aún siguen habiendo inútiles que no tienen compasión ni respetan el trabajo que han hecho otros. Si copias contenido, garantizo que no vas a llegar a ninguna parte, salvo los juzgados, porque asume que tarde o temprano alguien se cansará y te denunciará por plagio.

Tu Blog no tiene tráfico porque escribes para Google y no para Manuel

Cuando se puso de moda la idea de posicionar el contenido a toda costa, la gente escribía como robots con el único propósito de gustar a Google. Ahora la situación ha cambiado, y es el propio Google el que te penaliza como se te ocurra volver al pasado.

No te centres en el SEO ni te obsesiones con los resultados de búsqueda de Google. Obsesiónate por escribir y gustarte cuando te leas. Siente que el contenido que estas componiendo te interesa e invita a querer saber más. Es la única forma de gustar a los demás.

La dirección es lo más importante, Muchos van muy rápido sin saber a dónde se dirigen

No tengas prisa por obtener visitas en tu Blog, no quieras ser el primero de la clase. Comparte tu contenido en foros especializados en tu temática, crea amigos y sigue otros espacios similares generando confianza y formando parte de la comunidad.

Disfruta con cada paso que vas dando y prepárate para afrontar con optimismo los días en los que ese paso dé la sensación que va hacia atrás, porque debes saber que esos días llegarán, al igual que los lectores detractores de tu estilo. ¡Vamos!