Revista Belleza

"Tú Como No Eres Madre No Lo Entiendes"

Por Mariola Azores De Bustarviejo @MariolaAzores

No beber vino ni cerveza, no seguir los campeonatos mundiales de fútbol y no querer tener hijos son tres cuestiones que te convierten ipso facto en una persona extremadamente sospechosa a ojos de los demás:  no le gusta el vino (seguro que le pone ketchup a los noodles),  no le gusta el fútbol (esconde un muerto en el maletero del coche),  no quiere tener hijos (es responsable del calentamiento global, del Brexit, del tamaño de las etiquetas de Zara y del mal carácter de Soraya Sáenz de Santamaría).
"Tú como no eres madre no lo entiendes"
Estoy hablando de ti y de mí, de todos los hombres y mujeres que nos hemos convertido en el blanco fácil al que apuntan sus balas cargadas de intolerancia los hooligans de la reproducción. Tanto es así que incluso personas que no conoces de nada te piden explicaciones por una decisión que debería importaros a todos (conocidos y desconocidos, amigos y enemigos) un comino. Si tú tampoco tienes descendencia ni ganas de tenerla seguro que en más de una ocasión te habrán mirado raro o habrás tenido que escuchar algún comentario fuera de lugar.
Creo que este es el momento adecuado para hacer un inciso y subrayar -literalmente- que no todas las personas que han decidido hacer la vista gorda con la amenaza de la superpoblación se comportan de la misma manera con quienes no sentimos la necesidad de pasar nuestra herencia genética a otras generaciones.
Insisto para que nadie me malinterprete, que después me regañan: algunas de las personas a quienes más quiero, admiro y respeto son mujeres-madres maravillosas y hombres-padres estupendos además de individuos sensatos que no van por el mundo cuestionando las decisiones del prójimo.
Pero hoy no hemos venido a LMDM a hablar de ellos, sino de los otros. 
Yo sé lo que es sentirse como una auténtica outsider en una fiesta infantil. Al no ir vestida como una madre ni cargar con un churumbel en la cadera las madres presentes me mantuvieron convenientemente apartada del perímetro de sus conversaciones. Y aunque no fuera muy agradable verme convertida en el patito feo de la fiesta por otra parte lo agradecí, ya que los retazos de charla que llegaban a mis oídos giraban en torno a estos temas tan apasionantes:
-"Menganita está esperando".
-"¿Cómo llevas el embarazo?"
-Naúseas, estrías, pesadez de piernas.
-"Zutanita quiere quedarse embarazada".
-Tratamientos hormonales, inseminaciones artificiales (si hubieran hablado de inseminaciones naturales habría sido mucho más divertido, qué duda cabe).
-"Qué bien te has recuperado tú del embarazo".
-Episiotomías, ejercicios de Kegel, masajes perineales prenatales, flacidez vaginal, descolgamiento pectoral.
-"Yo tuve un post parto horrible".
-Bajones y subidones hormonales, hemorragias, puntos, almorranas, mastitis, grietas. 
Así hasta el infinito y más allá. He comprobado que solo el fútbol es capaz de generar tanto engagement entre sus seguidores como lo hace la maternidad.
8 Frases Que Tienes Que Escuchar Cuando No Tienes Hijos


1. "Tú como no eres madre no lo entiendes"
La primera frase de esta lista suele sin embargo ser la última. El punto final de una conversación que no les está gustando tener, así que te la arrojan a la cara como recurso cierrabocas para que te calles ya de una vez y dejes de insistir en el asunto. Es una variación para adultos del "porque lo digo yo y punto" tan educativo que les sueltan a sus hijos cuando se quedan sin argumentos.
Tú como no tienes hijos no lo entiendes. Así que ya está bien, aparca de una vez el temita.
¿Qué temita? Podría ser cualquiera relacionado con la paternidad que les ponga un poco nerviosos. ¿Qué tal por ejemplo para ir abriendo boca cualquier cuestión relacionada con lo consentidos que están a menudo los niños hoy en día?
No soy madre pero no tengo problemas para diferenciar a un niño bien educado de otro asilvestrado que hace con sus padres lo que quiere. Cito aquí a mi madre: "La dignidad no se puede perder por nadie, ni siquiera por los hijos".
2. "¿No te da miedo quedarte sola?"
Esta es una de mis favoritas, ya que me permite deleitarme con un pequeño placer culpable: observar tu carita de incomodidad cuando yo te pregunte a ti si tu principal motivo para tener hijos es asegurarte de que en tu vejez habrá alguien que esté obligado a cuidarte.
3. "Tú es que tienes mucho tiempo libre"
Mientras que hay padres que utilizan a los hijos como excusa para relegar a sus amigos, no hacerte un favor o cualquier otra cosa que les suponga un esfuerzo extra, tú por el contrario, como no los tienes, has de estar siempre disponible para ellos.
Vaya, pues conmigo has ido a pinchar en hueso. Si tuvieras tiempo para escucharme sabrías que mi vida, incluso sin hijos, está muy llena. Así que lo siento, no podré quedarme con los tuyos esta noche. Tengo mi mucho tiempo libre todo ocupado. Avísame un par de meses antes la próxima vez.
4. "Yo no tengo tiempo para esas cosas"
Pero mira que está feo culpar a los niños de haberos descuidado hasta ese extremo: los padres han echado tripa,  están blandos y han perdido la chispa. Las madres van con las ojeras al aire (con lo que podría hacer por todas ellas un un buen corrector), las mechas en las puntas de las puntas y si un hombre se las queda mirando lo primero que piensan es que llevan restos de papilla en el pelo.
5. "Qué envidia que tú puedes dormir de un tirón"
No soy madre pero sin embargo hay un par de asuntos relacionados con la formación de los niños que me quitan el sueño:
-¿Cómo es posible que el cangrejo de Bob Esponja sea el padre de una ballena?
-¿Nadie se ha dado cuenta de que Pepa Pig parece un secador de pelo?
6. "Quítate los zapatos" 
¿Nunca os han pedido que os descalcéis al entrar en una casa donde viven niños? A día de hoy el motivo continúa siendo un completo misterio para mí. Más teniendo en cuenta que jamás he visto unos seres humanos más cochinos que los niños: comen arena y hormigas, se tocan sus partes y los pies todo el rato y acto seguido se meten las manos en la boca, babean, se restriegan los mocos por todo el cuerpo, se chupan entre ellos, etc.
En serio, puedes quedarte tranquilo. Tu hijo se ha autoinmunizado contra cualquier bacteria que yo pudiera llevar en la suela de mis zapatos; la pobre no tendría ninguna oportunidad frente a ese titán emisor de virus letales que es tu hijo. Quién haya sufrido alguna vez las consecuencias de una gastroenteritis contagiada por un niño sabe bien de lo que hablo.
7. "No pensaba que a ti te gustasen tanto los niños"
Mucho más que ciertos adultos, créeme. Es más, ¡yo les gusto a ellos! Por como me estás mirando deduzco que albergas la sospecha de que intento ganarme su confianza para comérmelos después, igual que la malvada bruja de Hansel y Gretel. ¡ÑAM!

8. "¡Pero cómo no vas a tener hijos!"
"...¡si es lo mejor que le puede suceder a un ser humano!" Ahí lo tienes. Te acaban de llamar alien con todo el descaro pero eres tú quien siente que se debería disculpar por no convertir su útero en una pequeña fábrica de seres humanos que contagian la gastroenteritis (con lo que a ti te gusta llevarlo niquelado, que casi se podría comer en él) o por no guiar a todos esos espermatozoides indisciplinados hacia el fin superior de la procreación.
Lo cuento en tono de humor pero es una frase que va cargada de metralla sobre todo cuando el blanco somos nosotras porque, ¿qué mujer no querría tener hijos?
Algunas afortunadas lo hemos tenido siempre claro y por lo tanto los gestos de rechazo apenas nos afectan.
Pero hay mujeres que aún deseándolo, no son madres porque desafortunadamente no han encontrado al hombre con el que decidirse a serlo.
Hay mujeres que no son madres porque su pareja es otra mujer, y eso complica bastante las cosas.
Hay mujeres que no son madres porque aunque se han planteado la posibilidad de tener un hijo solas no disponen de los recursos económicos para sacarle adelante sin otro sueldo. Hay mujeres que no son madres porque aunque podrían permitirse tener un hijo solas la perspectiva de asumir tal responsabilidad les abruma, les paraliza.
Hay mujeres que no son madres porque llevan años intentándolo y no consiguen quedarse embarazadas. Hay mujeres que no son madres porque ya se han sometido a varios procesos de fecundación in vitro y han acabado desistiendo porque ni física ni emocionalmente pueden volver a pasar por ello.
Hay mujeres que no son madres porque su pareja les ha ido dando largas y ahora se encuentran en una encrucijada: o renuncian a su sueño de ser madres o dejan la relación.
Hay mujeres que no son madres porque comparten su vida con alguien que ya tiene hijos de una relación anterior y no desea tener más.
Lo que trato de hacerte entender es que esa mujer a la sin pensarlo dos veces le dices en tono inquisitorio "¡¿pero cómo no vas a tener hijos?!" tal vez ya lo esté pasando suficientemente mal sin tu empujoncito. Amenazarla con que se va a perder "la experiencia más bonita de su vida", hacerla sentir culpable por no haberse decido antes, acusarla en definitiva de no ser una mujer de verdad, no le ayuda.
Por eso te ruego que, aunque todos sabemos que los padres estáis siempre muy ocupados, hagas el esfuerzo de ponerte en su piel por un momento. Y que la próxima vez, por favor, cierres la boca.
Porque tú como ya tienes hijos no lo entiendes.
El otro día una amiga me comentó: "Hay mucha presión sobre las mujeres que no quieren tener hijos, y nadie habla de ello". Por eso en LMDM ya es la segunda vez que lo hacemos, si no lo leíste en su momento creo que también te puede interesar leer No quiero ser madre, ¿eso me convierte en una egoísta?
¿Qué otras frases te ha tocado oír por no tener hijos? 


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