La conciencia colectiva del planeta está subiendo y eso se puede observar en muchos ámbitos y campos de la actuación humana, desde la política, los negocios, el arte, el ocio, la salud, las relaciones y por supuesto la espiritualidad. Poco a poco está ocurriendo ALGO que a simple vista parece imperceptible, pero que cada vez son más personas las que lo experimentan y forman parte de un interesante colectivo. El colectivo de personas menos autodestructivas y más conscientes de su papel aquí. En la medida en que este fenómeno siga sucediendo crecerán las esperanzas por vivir en un mundo de paz, armonía y felicidad.
Esta última frase ha disparado una “alarma” en muchos de los integrantes de dicho colectivo que les lleva a adoptar una postura de movilización en la búsqueda de aumentar el grueso de sus filas cuanto antes. Una especie de carrera contrareloj que necesariamente hay que ganar. Para ello se están creando numerosas iniciativas en muy diversos frentes, cuyo objetivo principal es “Subir la conciencia de las personas”.
“…Pero subirla YA, ahora, en este momento y no dentro de unos años. Es AHORA cuando tienes que subir tu conciencia. El planeta lo necesita. Tú lo necesitas. Para ello debes empezar a hacer esto, o…. lo otro, o…. aquello”.
Este es, sin duda, un ejemplo de los mensajes que podrás escuchar o que te habrán enviado alguna vez y que se fundamenta en el deseo por vivir un mundo mejor, el cual todos compartimos. Pero….. hay dos pequeños matices que yo quiero compartir contigo:
1º – No puedes subir voluntariamente tu conciencia cuando tú quieras y mucho menos la de otros.
2º – No hay nada específico que tengas que hacer, por lo que se te garantive que tu conciencia va a subir.
Vayamos por puntos.
El primer matiz puede sonar un tanto desconcertante pero es importante que no te engañes ni te dejes engañar. La conciencia no la puedes subir de forma voluntaria igual que alguien que se prepara para correr una carrera y se pasa varios meses entrenando hasta que siente y comprueba que ya está listo para correrla. No, la conciencia no responde de esa forma. En todo caso podemos decir que tu conciencia sube, pero tú no la subes. Y subirá cuando tenga que subir. De hecho esta frase tampoco expresa con exactitud lo que quiero transmitirte. En realidad eres tú el que actúa desde uno u otro NIVEL de tu conciencia.
El segundo matiz hace alusión a un sinfín de prácticas y conductas que vienen asociadas a personas que ya tienen la conciencia más elevada. Por darte algunos ejemplos comer más sano, cuidar tu cuerpo, no dejar que tu mente controle tu vida, trabajar tu interior, vivir en armonía contigo mismo y con todo, disfrutar con las cosas más simples, romper patrones antiguos de comportamiento, dar y expresar amor, cuidar el medio ambiente, etc. etc. Dichas prácticas no son el camino para que subas tu conciencia. En todo caso serían un ejemplo de la EXPRESIÓN NATURAL de quién eres mientras recorres tu camino con una conciencia más elevada.
Es evidente que hacer las cosas de una determinada forma que beneficie nuestra existencia nos ayudará a todos. Pero si la decisión de hacerlo no nace en la propia persona sino que ha sido impuesta o recomendada por otros, entonces esa persona, aunque haga algo que otros dicen que es bueno, no entenderá el alcance de sus actos y por ende no tomará nunca decisiones actuando desde dicho nivel de conciencia. A la larga o a la corta nacerá el conflicto con su propia verdad. Este es el caso concreto de la población que no cuestiona a sus líderes o de los líderes que viven desconectados de su población.
Dicho esto, sí te quiero decir que TODO en tu camino es susceptible de contribuir y ayudar a que tu conciencia suba. Tu capacidad de observar la vida, tus decisiones, tus creaciones, tus relaciones, tus reconocimientos, etc. etc. forman parte de la larga lista de “elevadores” de tu conciencia. Pero hay una más, una en concreto que DESTACA frente a todas las demás:
Tu deseo profundo por ser más feliz.
Y al decirte “profundo” acabo de darte la palabra clave para que entiendas dónde se encuentra el PORTAL que te lleva a su encuentro.
De ello hablaré la próxima vez…
Hasta pronto
Luis