Hay rasgos de la personalidad que ya traemos de fábrica, impresos a fuego en nuestros genes. Luego, mas adelante, podrán intensificarse o suavizarse debido a nuestras vivencias pero esos rasgos están ahí, latentes. De hecho no es raro que los asociemos a este o a aquel miembro de nuestra familia mas cercana.
Observando a mi hijo hay rasgos con los que definitivamente ha nacido, aspectos muy marcados de su personalidad heredados de aquí y de allí sin ningún ápice de duda. Es orgulloso, competitivo, autocrítico y muy pero que muy prudente. A sus dos años y nueve meses, con toda la intensidad de los niños, ya me ha dejado una muestra bien clara de su carácter.Hace tiempo que me he dado cuenta también de que una de las principales tareas de una madre es saber observar. Conocer a nuestros hijos nos da la llave para negociar con ellos. Y créanme, "negociar" es muchas veces la palabra correcta a aplicar, especialmente a estas edades. Pero no es solo eso, no queda todo en un mero negocio es nuestro propio interés y el suyo por entendernos, porque nos queremos. Eso, amig@ mí@, es lo que estarás reflejando constantemente en ellos; Amor...
En tu hijo tendrás tu reflejo.Y tú ¿qué rasgos de la personalidad encuentras como más marcados en tu hijo?