Revista Cultura y Ocio
M. J. Arlidge ha trabajado en la televisión británica los últimos quince años, donde se ha especializado en la producción de series de calidad. Ha producido series dramáticas y policiacas de máxima audiencia como Torn, The Little House y Undeniable. Actualmente es guionista de Silent Witness y prepara un proyecto de serie de suspense para cadenas británicas y estadounidenses. Tú te vas, tú te quedas ha sido un gran éxito de ventas en Reino Unido, con más de 120.000 ejemplares vendidos en los primeros seis meses. Los derechos de traducción han sido comprados en otros veinte países, entre ellos Italia, donde también se ha convertido en un best seller.
Una chica sale del bosque casi moribunda. Su historia parece increíble. Pero es verdadera. Cada una de las terribles palabras que pronuncia.
Días después otra persona aparece en similares circunstancias. Poco a poco comienza a quedar claro un modo de actuar. Alguien está secuestrando a sus víctimas por parejas, las recluye y les hace afrontar un dilema: matar o morir.
¿Qué preferirías: perder la vida o perder la razón?
La inspectora de policía Helen Grace ha tenido que hacer frente a sus propios demonios y ha llegado a lo más alto. Mientras dirige esta investigación para dar caza al monstruo que anda suelto descubre que quizá sean los propios supervivientes quienes tengan la clave para resolver el caso.
Y, a menos que lo consiga, morirán más inocentes.
Tú te vas, tú te quedas es una escalofriante y emocionante novela narrada en su gran mayoría en tercera persona, aunque hay algunos capítulos en cursiva que están narrados en primera persona (en este aspecto, me ha recordado un poco a La Santa).
Los personajes son el punto fuerte de la novela. Tenemos personajes “fijos”, por decirlo de alguna manera, y personajes que son más aleatorios. Por un lado, tenemos a Helen, policía que está investigando una serie de asesinatos peculiares. Por otro tenemos a los personajes que forman parte del “juego” de una perturbada, porque no tiene otro adjetivo. Son parejas de personajes que tiene que matar o morir. La asesina les deja encerrados sin comida ni agua, solo con una pistola y una bala. Quien mate al otro, “gana” el juego. Me ha recordado en cierto modo a Saw, pero no es tan gore ni tan sádico. Hay partes asquerosas, pero no sangrientas (punto en contra :P).
La novela está narrada con un ritmo totalmente vertiginoso, ocasionado seguramente porque los capítulos son muy cortos y te motivas para leer más y más (ya sabéis, eso de “un capítulo más nunca funciona, y menos cuando son capítulos tan cortos). De hecho, hicimos lectura conjunta algunos bloggeros y todos estuvimos de acuerdo en que la novela tiene gancho. Prácticamente nos leímos el libro en un día.
El libro me ha gustado mucho, tanto que no podía parar de leer. Llegas a un punto en el que, literalmente, tienes que saber lo que va a pasar a continuación. Si la novela ya tiene ritmo trepidante desde el principio, a partir del capítulo 93 os aviso que NO PODÉIS PARAR. Cuando llegué a ese punto era la 1 de la madrugada, y a pesar de dormirme dos o tres veces, acabé el libro. Soñé y todo con él, jajaja.
Si tengo que decir algún aspecto negativo, y eso es algo en lo que la mayoría está de acuerdo, es que me ha parecido poco documentada la parte en que los “vencedores” son liberados y están tan esqueléticos y malnutridos después de tan solo un par de semanas. No sé, me ha parecido demasiado drástico en ese sentido.
Y también, otra cosa negativa del libro es que empieza muy fuerte, con muchísimo gancho, mucha trama, mucha intriga y mucha expectación, y el final se resuelve en tres o cuatro capítulos de manera precipitada (a mi parecer). Podrían haberle sacado más trama al asunto… Y me quedo ahí, que si no hago spoiler.