Tu trading es un reflejo de cómo eres, por eso cuándo algo no te funcione será bueno que observes en dónde está el atasco.
Cuándo comencé el camino para ser trader, allá por 2006, era de los que creía firmemente que a la hora de sentarte delante de las pantallas debías ser frío, sin emociones y convertirte en una persona diferente a la que era, es decir, ser un especie de robot.
Con los años esa creencia perdió por mi parte todo tipo de credibilidad y sustento, porque a la hora de hacer trading, somos la misma persona que para relacionarnos, trabajar, descansar, relajarse, enfadarse, etc…
Un trader a la hora de operar es un todo, con todas sus virtudes, conocimientos, defectos y limitaciones.
Y entonces, ¿qué hacemos con las emociones?
APRENDER A GESTIONARLAS, ¡ni más ni menos!
No se las puede eliminar ni obviar, lo que se debe hacer es observarlas, reconocerlas y actuar para no quedarte atrapado en ellas.
Por lo cual cuándo detectas un problema en tu operativa o ves que existe un patrón que se repite a menudo, estás anclado en él y es perjudicial para tu trading; seguramente se trate de algo que también aparece de manera explícita o implícita en tu vida.
Y cuándo sucede eso, el paso siguiente es arremangarse, embarrarse y hacer un viaje (puede ser corto o largo) hacia tu interior, para descubrir la verdadera raíz del problema.
En mi participación del pasado lunes en el programa de Laura Blanco que se emite en Capital Radio, expongo un ejemplo real de un trader que tenía en tutorías, de cómo descubrimos cuál era el verdadero problema que no le permitía crecer en su operativa.
Si quieres escuchar el audio, aquí lo tienes.
http://tradingycoaching.com/wp-content/uploads/2015/09/ENTRE-GERMAN-ANTELO.mp3Puedes dejarme un comentario y si te ha gustado, te pido que lo compartas.