Entre los apasionados del tunning hay de todo, unos que son sibaritas y otros que apuestan por el “cuanto más, mejor”. A esa subespecie debe pertenecer Steve Meade, el diseñador de este Chevrolet Tahoe del 2001, al que ha tuneado instalándole un equipo de sonido que ya no me atrevo a decir potente. Directamente te digo que eso lo ve Bush y lo declara arma de destrucción masiva.
Al loro con la potencia del subwoofer, coloca una guía de teléfonos y la hace picadillo, literalmente!