Una idea que surgió en un podcast de broma del director Kevin Smith se acabó convirtiendo en esta película que se mueve con demasiados altibajos entre el terror y el humor negro. El eje central que gira alrededor de la conversión de hombre a morsa sin duda es terrorífico y ofrece las mejores partes, el problema es todo lo demás, con un Johnny Depp interpretando un personaje ridículo que no aporta nada, unos insulsos secundarios sin pizca de carisma y lo peor de todo, una serie de flashbacks realmente cutres que cortan el ritmo y malogran una tétrica atmósfera que podría haber dado mucho más juego.
Mi puntuación: 4/10