Una de las formas más fáciles, y menos usadas porque nos da miedo estropear una tela bonita, o que se atasque la impresora, es imprimir directamente encima.
Con la cercanía de las fiestas navideñas, se pueden usar para decorar la mesa, colgándolas de candeleros, jarrones, frascos...
Y se pueden poner como indicador de la mesa (he impreso frases e imágenes, pero se puede imprimir el nombre de los comensales o mensajes más apropiados para esas fechas). Y ponerlas encima de los platos, o atadas a las servilletas.
TUTORIAL.
Necesitamos:
- Tela de color liso, preferiblemente de algodón o lino no muy grueso. Debe estar previamente lavada para quitar el apresto, y planchada.
- Impresora
- Un folio
- Pegamento reposicionable en espray (de venta en tiendas de bricolaje). Os pongo foto del que uso yo, hay otras marcas.
Recortamos la tela a tamaño dina4 (este es el único fallo, que no podemos usar un tamaño mayor en una impresora casera). La mía no es láser, no es necesario.
Rociamos bien el folio con pegamento reposicionable y pegamos la tela. La ponemos en la impresora (fijáos bien de qué lado hay que ponerla para que imprima sobre la tela), y listo.
Para que la tinta quede mejor fijada, planchar por el revés la tela. Este sistema queda muy bien, pero tiene la desventaja de que no se puede lavar. Si añadimos encima un medium textil, se podrá lavar -a mano y con cuidado-, pero la imagen y la tela quedan un poco amarillentas. Si lo que queréis es que quede más rígida, podéis aplicar cola blanca disuelta en agua por toda la etiqueta, al secarse quedará la tela dura, como he hecho yo para usarlas como os he enseñado.
Me voy con esta entrada a otro Finde Frugal de Marcela y al Viernes Handmade de Little Kimono. Besos.