TVE socialista

Haga lo que haga el Gobierno de Rajoy para controlar Televisión Española, sus informativos seguirán siendo prosocialistas con apariencia de objetividad, mientras que si pretende que sean conservadores, resultarán panfletos derechistas fácilmente detectables.

La razón es que los periodistas se forman mayoritariamente como progresistas, y su visión natural de la noticia es afín a la de la izquierda.

Tras el franquismo podría pensarse que las universidades le darían a los periodistas una formación equilibrada, no sometida a la cultura dominante entonces, consecuencia del 68.

Pero resultó que algunas carreras quedaron tuteladas por profesores marxistas, antiguos antifranquistas, y el izquierdismo se incrementó especialmente en las diferentes ramas de Periodismo y de Políticas.

No ser izquierdista en esas Facultades es sinónimo de franquista, incluso de fascista.

El periodista común en medios como TVE está sometido a la presión de presentar los hechos según el pensamiento mayoritario progresista de la Redacción, de manera que en el debate sobre el aborto, por ejemplo, el sí ni siquiera se discute como un derecho humano fundamental.

El periodista que proponga que alguien popular, nada gris, justifique argumentos contrarios se expone a ser tratado como reaccionario por la mayoría.

Si el PP trata de corregir la información de TVE deberá contar con profesionales muy ideologizados, que demostrarán su tendencia reafirmándola con arduas explicaciones para justificarla.

Los informativos tienen el tiempo limitado, y en ellos la exposición contundente de ideas emotivas, como paz, justicia social, estado del bienestar, es sencilla, conmovedora e instantánea para la izquierda.

Pero analizar esos mismos conceptos con sus pros y contras, en su contexto y en diferentes situaciones, le exige a la derecha una elaboración más intelectual, compleja y sobre todo larga, por lo que disponiendo de poco tiempo de imagen, tiende a resumir acudiendo al panfleto.

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SALAS