El Sr. Pierre Moscovici, gran jefe de la U.E. en materia económica y financiera ha advertido a España que en el ejercicio 2016, tiene que ajustarse al plan de reducción del déficit presupuestario, lo que va a suponer recortes adicionales por cerca de 9.000 millones de Euros.
Añadió que España ha alcanzado un nivel de crecimiento del PIB que está muy por encima del promedio de la U.E., siendo uno de los países donde más ha crecido el PIB, pero ha sobrepasado el límite de crecimiento del déficit presupuestario.
La U.E. no solo impuso en su día las medidas económicas más absurdas y estúpidas posibles para salir de la crisis, sino que cuando disponen de datos más que suficientes para concluir que su estupidez alargó por lo menos en dos años la crisis en la U.E. y finalizó en una situación sumamente precaria y frágil que corre el riesgo de provocar una tercera crisis, continúan con su discurso. Si España obtiene unas cifras de crecimiento del PIB elevadas dentro de la U.E. una de las principales razones es precisamente porque no cumplió el límite del déficit presupuestario.
En una de las últimas reuniones de Davos, no recuerdo si la de 2013 ó 2014, el propio Wolfgang Shäuble, Ministro de Finanzas de Angela Merkel afirmó que en épocas de bonanza se debe actuar para reducir el déficit presupuestario, y de esta forma disponer de margen para aumentar el déficit en épocas de crisis. Lo curioso es que su jefa obligó a los países de la Unión Estúpida a hacer exactamente lo contrario, es decir reducir el déficit a lo bestia en época de crisis.
Encima los pocos que defienden las medidas estúpidas fuera de la U.E. y el F.M.I. por lo general indican que su objetivo es obtener recursos mediante los recortes en gastos para poder pagar la deuda pública, pero curiosamente, como en todo lo referido a las medidas estúpidas de la U.E., no solo no cumple su objetivo, no soluciona el problema, sino que lo empeora. Para comprobar que en la reducción de la deuda pública las medidas también han fracasado estrepitosamente se puede usar el caso de España que cuando en el 2011 la Loca de Berlín impuso su idiotez económica a la U.E. soportaba una deuda pública que suponía solo el 62 % del PIB, mientras que hoy, después de la aplicación de las medidas estúpidas es del 100 % del PIB, un 61 % de aumento en proporción al PIB, no está mal ¿verdad?, para unas medidas que tenían que rebajar la deuda. Al igual que en España la deuda pública ha sufrido un espectacular aumento en todos los países donde se han aplicado las medidas estúpidas.
Entre los países “rescatados” también hay grandes ejemplos del estrepitoso fracaso de una U.E. totalmente ciega para poder darse cuenta de sus propias barbaridades. Irlanda ha sido el primer país “rescatado” y en cualquier caso uno de los primeros de la U.E., en dejar atrás la crisis y la recesión, probablemente porque se negó a aplicar la totalidad de las medidas estúpidas, no subió los impuestos y no recortó varios conceptos de gasto público.
El caso de Grecia es paradigmático. La crisis griega estalló en 2010 y la Loca de Berlín la aprovechó para imponer su idiotez económica. Desde entonces el país no solo no se ha recuperado sino que va de mal en mucho peor. Los recortes han sido continuos y permanentes, como ejemplo, las pensiones son hoy inferiores en un 40 % a las del 2010, y a pesar de ello el país va en caída libre que a menos que la U.E. sufra un ataque de sentido común, probablemente acabará en un levantamiento popular o algo peor. Encima la deuda pública se dobló en cuatro años, ahora casi toda a cargo de la U.E., porque el único éxito del “rescate” griego es exclusivamente alemán porque los bancos alemanes, que soportaban bastante más de la mitad del riesgo financiero griego cuando estalló la crisis, hoy día se han librado de tan pesada y peligrosa carga, transfiriéndola a la U.E., y de esta forma varios países de idiotas como España, que no tenían riesgo griego hoy día soportan cifras importantes, unos 30.000 millones de Euros en el caso de España. Para completar el panorama se puede comparar lo ocurrido en Grecia con Islandia, un país que estaba quebrado en condiciones parecidas a las de Grecia al inicio de la crisis, pero que tiene la inmensa suerte de no pertenecer a la U.E., y no solo han solucionado su problema porque nadie les ha obligado a hacer el idiota, sino que dejaron atrás la crisis y la recesión mucho antes que cualquier país de la U.E.
Por todas estas razones, y porque ya estoy hasta la coronilla de una U.E. que solo sabe exigir que hagamos idioteces, he informado a mi amigo galés que el día del referéndum sobre la eventual salida de la U.E. le visitaré, porque aunque no pueda votar quiero ver como otros pueden hacerlo, y por supuesto que si pudiese votar lo haría por salir de la U.E. a toda velocidad.
Precisamente estos días ha transcendido en la prensa que en una reunión de la Comisión Europea en 2012 la Loca de Berlín le dijo a David Cameron “todos te odiamos”. Si la señora llevase a cabo una encuesta entre todos los europeos para saber cuántos de nosotros la odiamos profundamente se llevaría una sorpresa, sobre todo después del numerito de los refugiados, adoptando primero el papel de madre amantísima de los refugiados, para darse cuenta posteriormente que el efecto llamada había causado una catarata de refugiados camino de Alemania y cambiar de postura, creando otro problema en la U.E. que puede acabar con el espacio Shengen, porque no puede criticarse a los países de paso que levantan barreras de todo tipo, si al llegar los refugiados a Alemania se les niega el paso y millones de ellos se quedan por el camino.