El ex director de la CIA, John Brennan, dijo el martes que personalmente advirtió al jefe de servicios de inteligencia de Rusia el año pasado que la interferencia de Moscú en las elecciones estadounidenses sería contraproducente y causaría graves daños a la relación del país con Estados Unidos.
Describiendo una discusión de alto nivel previamente no divulgada entre Washington y Moscú, Brennan dijo en una conversación telefónica con el jefe del servicio de seguridad nacional de Rusia, el FSB, que “los votantes estadounidenses estarían indignados por cualquier intento ruso de interferir en las elecciones”.
En el testimonio del Congreso, Brennan dijo que tal intromisión “destruiría cualquier perspectiva a corto plazo de mejora” en las relaciones entre Estados Unidos y Rusia. Brennan dijo que el jefe del FSB, Alexander Bortnikov, negó dos veces que Rusia llevara a cabo tal campaña, pero dijo que transmitirá el mensaje de Brennan al presidente ruso, Vladimir Putin.
“Creo que fui el primer funcionario estadounidense en ayudar a Rusia en este asunto”, dijo Brennan. Sus observaciones se produjeron al comienzo de su testimonio ante el Comité de Inteligencia de la Cámara como parte de la investigación en curso de ese panel de una campaña de influencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016, así como si hubo colusión o coordinación entre Moscú y los miembros de la campaña Trump.
Brennan lideró la CIA durante un período crítico del año pasado cuando las agencias de inteligencia estadounidenses concluyeron que Rusia no sólo estaba tratando de perturbar las elecciones, sino que estaba buscando activamente derrotar a la candidata demócrata Hillary Clinton y ayudar a elegir a Trump.
Brennan estaba entre los altos funcionarios que informaron al entonces presidente electo Trump sobre esa conclusión, lo que representaba la opinión consensual de la CIA, el FBI y la oficina del Director de Inteligencia Nacional.
Brennan se alarmó tanto por la intervención rusa el pasado otoño que mantuvo reuniones secretas con altos funcionarios del Congreso para impresionarles la naturaleza sin precedentes de la interferencia de Moscú.
Brennan testificó que estaba preocupado por la inteligencia que apareció el año pasado mostrando un patrón de contactos entre agentes o representantes rusos y personas con vínculos a la campaña Trump. “Yo era consciente de la inteligencia y la información sobre los contactos entre los funcionarios rusos y las personas de los EE.UU. que plantearon preocupaciones en mi mente”, dijo Brennan. Hizo hincapié en que la información que vio no equivalía a prueba de connivencia o cooperación entre los socios de Trump y Rusia, pero dijo que “sirvió como base para la investigación del FBI”.
Con esa observación, Brennan pareció identificar el punto de origen de la investigación del FBI que comenzó en julio pasado, la primera vez que un funcionario de los Estados Unidos dio una idea de lo que motivó la investigación de la oficina.
Dijo que los objetivos de esos enfoques rusos tal vez ni siquiera eran conscientes de la naturaleza de los contactos, porque los servicios rusos a menudo disfrazan sus esfuerzos utilizando intermediarios. “Muchas veces [EE.UU. Individuos] no saben que el individuo con el que están interactuando es un ruso “, dijo Brennan.
El ex jefe de la CIA es el último de una serie de altos funcionarios del gobierno de Obama para aparecer públicamente ante el Congreso en audiencias que a menudo han producido titulares perjudiciales para Trump.
A principios de este mes, la ex procurora general Sally Yates declaró que esperaba que los funcionarios de la Casa Blanca “tomaran acción” después de advertir que el entonces consejero de seguridad nacional Michael T. Flynn había engañado a los funcionarios del gobierno sobre sus contactos con Rusia.
Con información de Washington Post.
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