La EPA planea reducir sustancialmente las pruebas en animales, incluidas las que encarga internamente, así como las que requiere que las empresas realicen, para 2025, y finalizarlas por completo para 2035. La agencia también dedicará $ 4.25 millones al desarrollo de -Tecnologías animales (también conocidas como nuevas metodologías de enfoque o NAM) en cinco universidades. Estos enfoques podrían incluir tecnologías de órganos en un chip, cultivos celulares, modelado por computadora y otros métodos que son más rápidos, más baratos y más predictivos que las pruebas en animales que consumen mucho tiempo.
La decisión de la agencia de dejar de usar los resultados de los estudios de mamíferos para la aprobación de nuevos productos químicos salvará aún más vidas animales.
