Las lineas del más tierno abrazo
Una mujer exquisita
es aquella con la cual,
en la frontera de la vigilia
una vez, soñé las lineas
del más tierno abrazo.
Una mujer con la cual,
en el reino de la imaginación
mis veladas ensoñaciones,
aprendieron a dibujar
un millar de abrazos sin fin.
Una mujer que sabrá pintar
en las laderas de la vigilia
con sinceros brazos
un millón de cálidos abrazos
para aquel que despierte su amor.
Más letras para la música de un fragmento perdido de mi ánima. Siempre he anhelado el delicado abrazo de la mujer más exquisita: la Poesía. Una Poesía que renace, cada vez más rica, con cada tierno abrazo que le ofrecemos.
Lo que ahora no alcanza la perfección, la alcanzará en un intento posterior o reiterado; nada de lo que abrazó la historia es pasajero, y a través de transformaciones innumerables renace de nuevo en formas siempre más ricas. (Novalis)