Un árbol de libros

En poco menos de dos días llega el último mes del año, lo cual implica mucho rojo y verde aquí y allá, renos, árboles, obsequios y muchas cosas  más.  Y aunque diciembre no haya empezado oficialmente, muchos de nosotros ya hemos visto en los lugares donde vivimos cómo el ambiente navideño se apodera de calles y centros comerciales.  Siendo una de las épocas más populares del año, no es sorpresa que desde octubre ya quieran vendernos a Santa Claus o Rodolfo el reno, por ejemplo. Por ello es que no pude evitar sonreír al ver una curiosa imagen donde esta famosa festividad se combina con nuestra fuerte pasión: los libros.

En cierto modo, no es de extrañar que  la persona dueña de esta obra de arte tuviera tan brillante idea, después de todo se ve que es una amante de la lectura y tanto la creatividad como la fantasía deben acompañarla diariamente. Sin embargo, admito que personalmente no se me habría ocurrido nunca. Eso sí, pueden estar seguros de que algún día copiaré la idea con mi propia biblioteca. 
Pero más allá de lo maravilloso que se ve el árbol, resulta muy curioso que la ‘estrella’ que lo corona sea  Fahrenheit 451, de Ray Bradbury. Para quien no conoce la historia, basta decir que los bomberos se encargan de quemar libros, y si a eso se le añade que el árbol está rodeado de luces…bueno, mejor ni pensarlo. Personalmente me buscaría una decoración menos peligrosa y una ‘estrella’ menos sugestiva.
Aunque esta época de fin de año no es del agrado de muchas personas, no se puede negar que sería divertido tomar los ejemplares de nuestra biblioteca y armar nuestro propio árbol de libros.  Y  tú, ¿te atreverías a armarlo?