INVESTIGACIÓN Y POESÍA
Un importante caballo de batalla narrativo cuando se tiene un personaje de largo recorrido consiste en la forma de hacerlo envejecer. José Luis Correa, que lleva ya unos buenos años con su Ricardo Blanco, nos lo muestra en esta entrega bastante sosegado, aludiendo en unas cuantas ocasiones a sus recuerdos, y muy consciente del momento en el que vive.
Dicho momento, además, era nada menos que el final del confinamiento estricto, cuando las heridas de la pandemia y el virus estaban aún muy frescas. La reflexión, por tanto, se vuelve un poco más amarga, tal y como fueron aquellos meses, y en ese entorno tratan de sobrevivir Blanco y los suyos, Inés, ya más que una colaboradora, el amigo Gervasio, policía retirado, y Beatriz, el ancla que la vida le ha regalado al detective y que no está dispuesto a perder bajo ningún concepto.
El caso, además, pone una buena guinda sentimental al cuadro, una pareja, la formada por Elías Almeida y Ángel Estupiñán, ha encontrado la muerte en la placidez de su buhardilla. Dos seres de luz, a juzgar por lo que de ellos declaran los testigos, que ven truncada su felicidad. A partir de ahí, Ricardo Blanco tendrá que emplearse a fondo para ir desbrozando las sombras que acechaban a tanta felicidad, y atinar justo con el momento en el que hay que empezar a desvelar verdades y alguna que otra miseria.
Con la calma que dan los años, con el sosiego que da el tiempo (y en ocasiones el recuerdo del abuelo Colacho Arteaga), José Luis Correa deja que su hijo literario vaya fluyendo a mitad de camino entre la investigación y la propia reflexión sobre la vida, la sociedad que iba surgiendo entre los jirones de la pandemia. Y todo lo hace desde la calma y la reflexión, porque el ritmo desbocado ya se quedó en otras historias.
Si alguien alguna vez dudó de que el lirismo y lo poético pudieran estar presentes en una novela negra, debería acercarse a las obras de Correa, porque entremezcla muy bien ambos rasgos con el misterio y un sentido del humor de lo más zumbón, quizá un rasgo característico de la narrativa isleña.
Acompañen a Ricardo Blanco y a su pequeña familia en esta historia de ambigüedades y silencios, disfrutarán al verle manejarse por Las Palmas y por su propio universo.
‘Un arpegio de lluvia en el cristal’.
José Luis Correa
Alba Novela Negra. Barcelona 2024.
221 páginas.