CARRIQUIRY Lecoeur, Guzmán. Memoria, Coraje y Esperanza. Editorial Nuevo Inicio. Granada, 2017, 127 pp.
Gracias a la generosa invitación del autor del blog que comparto, he podido leer y reflexionar acerca de la antología de textos del reconocido autor Guzmán Carriquiry y me he leído de un tirón su provocador libro. Los fastos del Bicentenario me recuerdan los del Quinto Centenario y el acertado comentario de José Luis Martín Descalzo (+): "un aniversario o es un camino o es un camelo". Y Carriquiry nos avisa de cinco camelos o riesgos del Bicentenario: 1. La retórica vacía cuando no malévola de invectivas de leyendas negras. 2. Patrioterismo pueblerino, sin incluir la "Patria Grande". 3. La distorsión ideologizada. 4. Visión erudita y romántica, con aire de autobombo. 5. Excluir a Brasil.
Denuncia los 8 "a pesar de": subdesarrollo, dependencia neocolonial,balcanización, el empeoramiento de los indígenas, formación de polis oligárquicas, guerras fratricidas, desmantelamiento eclesiástico y crisis de la cristiandad indiana, ruptura entre élites y pueblos.
Los 10 nuevos mandamientos: Promover desarrollo económico sólido y persistente, reforma del Estado, invertir en capital humano y social, la equidad, reconstruir el tejido sociofamiliar, auténticas democracias, crear las condiciones de una nueva independencia, desbloquear y relanzar la integración, paz, ahondar cimientos y mantener vivos ideales de independencia espiritual.
"Patria viene de paternidad y nación –de natio- evoca maternidad, mientras que el pueblo es la fraternidad más allá de la estirpe" p.126
"¡Cómo no sentirse hoy protagonistas de un gran giro histórico, de un cambio de época, como lo intuyeron y percibieron en su tiempo los grandes misioneros que fueron forjadores de pueblos nuevos, mestizos y bautizados, y como lo protagonizaron también, siglos después, los grandes padres de nuestra primera Independencia, anhelantes de libertad, justicia y unidad!" p.127
Gracias, maestro Carriquiry, por ayudarnos a elevar la mirada, crear lazos, tender puentes y galvanizar nuestros esfuerzos por una tarea común.
Celebro el asertivo y afectuoso prólogo del Papa Francisco: "El Bicentenario de la Independencia es una buena ocasión para levantar vuelo y mirar horizontes más grandes" p.X
Felicitaciones por la obra. Hay que leerla en privado, reflexionarla en común, y aplicarla entre todos ¡cuánto antes!
JAB
La promesa de América Latina
Blog de francisco bobadilla: https://tertuliaabierta.wordpress.com/2018/02/19/la-promesa-de-america-latina/
América Latina, Bicentenario, Guzmán Carriquiry
Guzmán Carriquiry vuelve a escribir sobre América Latina a propósito del bicentenario de la independencia de los países latinoamericanos ("Memoria, Coraje y Esperanza. A la luz del Bicentenario de la Independencia de América Latina". Presentación del Papa Francisco. Editorial Nuevo Inicio. Granada, 2017). Antes, en el 2005 publicó Una apuesta por América Latina. Siguió a este libro El bicentenario de la independencia de los países latinoamericanos (2011). Estos dos últimos libros fueron prologados por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge Mario Bergoglio. La nueva entrega de Guzmán Carriquiry, que ahora nos ocupa, es presentada por el Papa Francisco. La lectura de Memoria, Coraje y Esperanza dice mucho del pensamiento del profesor uruguayo, actual Vicepresidente de la Comisión Pontificia para América Latina y, también, dice de la visión del Papa Francisco sobre América Latina, expresada en sus viajes a Ecuador, Bolivia, Paraguay, Colombia, Chile y Perú.
El profesor Guzmán Carriquiry forma parte de la tradición uruguaya de intelectuales preocupados en el destino de América Latina y que se ocuparon de pensarla. Un hito importante de esta veta intelectual es el uruguayo Methol Ferré (1929-2009), a quien estuvo unido por lazos de amistad y de coincidencia académica. Guzmán Carriquiry ofrece, en su último libro, una gran síntesis de lo que significó la independencia histórica de los países latinoamericanos de España y Portugal. Doscientos años de trayectoria republicana que, desde entonces, tiene aún tareas pendientes, cuya realización pende del esfuerzo, coraje y creatividad de las sucesivas generaciones de latinoamericanos.
Guzmán Carriquiry señala que la "revolución iberoamericana se inscribe en la larga onda de liquidación del ''Ancien Regime'' y de la pujanza de tendencias liberales que, en la política como en la economía y la cultura, fueron imponiéndose con la emergencia del mundo burgués. Hay una continuidad evidente entre el reformismo ilustrado de las monarquías absolutas y el liberalismo pos-revolucionario: ambos quisieron ''ilustrar'' a una sociedad llena de ignorancia, criticar muchas tradiciones a la luz de la razón, someter la Iglesia al Estado, promover la libertad de comercio, desamortizar la propiedad y disminuir la autonomía de los pueblos y de las corporaciones" (p.47). Y, así como en la Revolución francesa se suprimieron los gremios profesionales y se prohibió todo tipo de asociación, pasó, también, en nuestra naciente república peruana, en donde las comunidades campesinas quedaron desprotegidas. La ideología del ciudadano solo frente al Estado del naciente liberalismo, sin ningún tipo de mediación, pudo más que la realidad.
El resultado de esta revolución emancipadora se "resolvió en balcanización. Quedó una ''nación inconclusa''. Y, ciertamente, aun cuando hemos realizado esfuerzos encaminados a buscar la integración de la Región, éstos no acaban de ser lo suficientemente significativos para pensar que detrás del concepto de América Latina tenemos una realidad sólida que la avale. Jorge Basadre, en la primera mitad del siglo XX, habló de la "promesa de la vida peruana" (1945), algo que no somos todavía, pero que deberíamos llegar a ser. En eso estamos. Quizá de América Latina deberíamos decir algo semejante. Tenemos muchos elementos históricos, religiosos, culturales que nos unen y, también, bastante historia en estos doscientos años que nos han llevado a configurarnos como países independientes. Nos sabemos pertenecientes a una Patria, pero quizá todavía hay mucho camino que recorrer para sabernos y sentirnos pertenecientes de la Patria Grande latinoamericana. América Latina no es una unidad integrada, pero es una buena apuesta como lo sugiere Guzmán Carriquiry; no es una realidad tangible ahora, mas es una promesa retadora como lo afirmara Jorge Basadre respecto al Perú.
"Unidos por la esperanza" es mucho más que un lema, es un programa de trabajo que el Papa Francisco propone para América Latina, cuyo "testigo" toma Guzmán Carriquiry en esta carrera de relevo generacional: "la esperanza que el actual pontificado siembra en nuestros pueblos ha de revertirse en movilizaciones populares y debates políticos e intelectuales en pos de un renovado proyecto histórico para América Latina, no obstante, las condiciones por cierto confusas y críticas, del contexto internacional. ¡Que no se diga nuevamente que América Latina es el continente de las oportunidades perdidas…!" (p.76).
Lima, 18 de febrero de 2018
ANTOLOGÍA DE TEXTOS:
1. PATRIA GRANDE
Nos duele la Patria que no acoge y custodia, de hecho, a todos sus hijos Anhelamos si, la Patria Grande, pero solo será grande-se lee en el documento de Aparecida, no. 527-cuando lo sea para todos y con mayor justicia y equidad. (p. X)
FBR: Objetivos y Movimientos Populares.
2. IDEOLOGIA
¿Qué es lo que está pasando en América Latina? ¿En qué queda el apelativo de continente de la esperanza''? ¿Acaso nos resignamos a un pragmatismo de muy corto aliento en medio de la confusión? ¿Nos limitamos a maniobras de cabotaje sin rumbos ciertos? ¿Volvemos a confiar en ideologías que han demostrado fracasos económicos y devastaciones humanas? Hacen falta serio y apasionados debates sobre nuestro pasado, presente y futuro. Necesitamos cultivar y debatir proyectos históricos que apunten con realismo hacia una esperanza de vida más digna para las personas, familias y pueblos latinoamericanos. Urge poder definir y emprender grandes objetivos nacionales y latinoamericanos, con consensos fuertes y movilizaciones populares, más allá de ambiciones e intereses mundanos y lejos de maniqueísmos y exasperaciones, de aventuras peligrosas y explosiones incontrolables. (p. X)
3. PENSAMIENTO UNICO
El ''pensamiento único'', además de ser social y políticamente totalitario, tiene estructura gnóstica: no es humano; reedita las variadas formas de racionalismo absolutista con las que culturalmente se expresa el hedonismo nihilista al que se refiere Methol Ferré. (p. XV)
4. MARÍA NUESTRA
Tiene el coraje de mirar más hacia atrás y más allá, hacia la promesa de ese mestizaje cultural proféticamente plasmado en el rostro aindiado de una Madre embarazada y en su confortante mensaje de vida promisoria hacia el futuro: '' ¿Acaso no estoy yo aquí que soy tu Madre?''(p. XVII)
Introducción
5. EL PUEBLO Y LA NACION ES ANTERIOR AL ESTADO
(…) la cultura barroca y el ethos formado a través de la tradición y la convivencia cotidiana, pero también su carga de desgarramientos y laceraciones. Sin ello deforma la mirada sobre nuestro procesos de independencia y se tiende a la concentrarla más en los Estados en que los pueblos como sus sujetos históricos. ''Nuestra Patria no nace a partir del poder político y sus instituciones —afirman los Obispos mexicanos en su Carta Pastoral del 2010—,sino que emerge gradualmente a partir del siglo XVI, como una realidad mestiza (…)''; de tal modo que ''la Nación Mexicana, entendida como una realidad cultural profunda, posee una soberanía anterior al Estado'' y que ''acontecimientos históricos tan importantes como la Independencia y la Revolución debe ser interpretados en base a la continuidad del mismo pueblo que conforma esta Nación'' (p .14)
6. LIQUIDACION DEL ANTIGUO REGIMEN
No hay duda de que la revolución iberoamericana se inscribe en la larga onda de liquidación del ''Ancien Regime'' y de la pujanza de tendencias liberales que, en la política como en la economía y la cultura, fueron imponiéndose con la emergencia del mundo burgués. Hay una continuidad evidente entre el reformismo ilustrado de las monarquías absolutas y el liberalismo pos-revolucionario: ambos quisieron ''ilustrar'' a una sociedad llena de ignorancia, criticar muchas tradiciones a la luz de la razón, someter la Iglesia al Estado, promover la libertad de comercio, desamortizar la propiedad y disminuir la autonomía de los pueblos y de las corporaciones. (p.47)
7. BALCANIZACION
La emancipación se resolvió en ''balcanización''. Quedó una ''nación inconclusa'' al decir de Jorge Abelardo Ramos en su Historia de la Nación Latinoamericana. Mientras se iban constituyendo los poderosos Estados Unidos de América del Norte, nacieron los frágiles e impotentes Estados desunidos de Iberoamérica. (p.52)
8. SUBDESARROLLO
El trigo y los nitratos en Chile, el tabaco de Colombia, la carne y la lana en Argentina, el azúcar de Cuba , el café de Brasil, el cacao venezolano, el guano del Perú. Tal será su lugar marginal en la desigual división internacional del trabajo en tiempos de propagación de la primera fase de la Revolución Industrial. (p.57)
9. CONCEPCION PATRIMONIAL DEL ESTADO
De allí procede la tradición de la concepción patrimonial del Estado, del predominio y prepotencia de los propios intereses económicos sobre el bien común, y a su vez, de la inestabilidad en condiciones de una fuerte turbulencia política. En efecto, a los sectores populares del interior de las repúblicas no les quedaba otra alternativa que enrolarse en milicias irregulares, de conducción caudillista, a veces vinculadas a formas de pandillaje, que ponían continuamente en jaque el ''orden'' constitucional y derribaban gobiernos. De allí también la ''tradición'' de gobiernos autoritarios, el escaso respeto a la ley, la fragilidad de la continuidad y autoridad de las instituciones. (p.63)
10. CHILE Y BOLIVIA
La Guerra del Pacífico (1879-1883), conocida también como la guerra por el guano y el salitre, enfrentó a Chile — También bajo el influjo de intereses ingleses —contra Perú y Bolivia: la victoria de Chile trajo consigo el despojo del litoral oceánico de Boliviay dejo irresueltas e hiper-sensibles situaciones fronterizas entre los países implicados, de los que cabe esperar, todavía hoy, acuerdos magnánimos y fraternos de integración y colaboración en un litoral pacífico compartido.(p.65)
11. NO HAY ANTICLERICALISMO
La independencia tuvo también un costo grande para la tradición cristiana de los pueblos iberoamericanos y para la presentación y misión de la Iglesia Católica en ellos. La Revolución iberoamericana no tuvo, en principio las tendencias anticlericales e incluso antirreligiosas que caracterizaron a la Revolución Francesa. No hay asomo de ello en los proceso de la independencia hispanoamericana y brasileña. (p.65)
12. REFORMAS ECLESIASTICAS
Así como las tierras indias, también las tierras eclesiásticas —que en muchas partes fueron sostén efectivo de las necesidades de los sectores populares —fueron asaltadas por las oligarquías criollas, interesadas por ampliar por doquier sus latifundios. La apropiación de los bienes eclesiásticos, la persecución a las órdenes religiosas y el control al episcopado y a su relación Roma, fueron las tres temas cruciales y conflictivos promovidos por las ''reformas eclesiásticas'' emprendidas por casi todo los gobiernos de los nuevos países. Por eso hubo caudillos como Facundo, en el interior de Argentina, que se levantaron bajo el lema: ''Religión o muerte''. (p.67)
13. CRISTIANIDAD AMERICANA
Y no obstante, las condiciones críticas, la cristiandad americana sobrevivía las guerras de la independencia. Las primeras constituciones de los nuevos países establecieron la religión católica como religión oficial del Estado, para pasar tiempo después de la libertad oficial del Estado, para pasar tiempo después a la libertad de culto y ya,entrado el siglo XX, a la separación entre la Iglesia y el Estado. (p.70)
14. Y DE LA HISTORIAGRAFIA CAVIAR SESGADA
Importa sobre todo superar las limitaciones y distorisiones de la historiografía liberal, que ha sido por muchas décadas la referencia oficial, académica, escolástica dominante, y que en buena medida conserva aún su vigencia. (p.75)
15. PROYECTO HISTORICO
La esperanza que el actual pontificado siembra en nuestros pueblos ha de revertirse en movilizaciones populares y debates políticos e intelectuales en pos de un renovado proyecto histórico para América Latina, no obstante las condiciones por cierto confusas y críticas, del contexto internacional. ¡Que no se diga nuevamente que América Latina es el continente de las oportunidades perdidas…! (p.76)
16. CULTURA DE LA SOBRIEDAD
Hay que saber combatir, ciertamente, los capitales ociosos, los lujos escandalosos y las maniobras meramente especulativas, así como desalentar la fuga de capitales y de cerebros. Es una tarea ineludible la de fomentar por todos los medios el ahorro nacional, un sistema tributario serio y equitativo y una capitalización bien invertida en el desarrollo nacional, pero también hay que saber atraer, y no ahuyentar, a los capitales extranjeros —tenemos necesidad imperiosa de ellos—,siempre que sean productivos y multiplicadores de empleos, difusores de tecnología y formadores de personal, con voluntad de reinversión local o regional, debidamente controlado pero seriamente respetados en el marco de garantías legislativas y de responsabilidad administrativa.(p.79)
17. MOVIMIENTOS POPULARES
Hemos entrado en una fase de muy fuerte precariedad de las condiciones de trabajo, que se expresa también como precariedad de la existencia. Así decaen mucho los derechos sociales y labores. Se multiplican formas de explotación laboral que llegan a generar condiciones de verdadera esclavitud. Muchos sectores campesinos quedan sumidos en condiciones miserables de ida, en la tenaza entre minifundios improductivos y grandes latifundios en manos de pocos. Y se incrementan los vastos mundos de los excluidos en las periferias miserables de las grandes ciudades. El Papa Francisco ha querido dar respuesta a estas situacionesconvocando en sucesivas oportunidades a los ''movimientos populares'' y alentando sus modalidades de solidaridad y sus reivindicaciones de ''pan, techo y trabajo''. (p.85)
18. INEQUIDAD Y EXCLUSION
Se trata —¡nada menos!—que de erradicar esas pobrezas, atacando a las causas que producen esos flagelos en las que combinan la economía de la inequidad y la exclusión y la exclusión con la cultura de la indiferencia. (p.86)
19. SOBERBIA POPULAR
La Familia, el trabajo y la educación son los tres pilares fundamentales para ir reconstruyendo una ecología humana de a convivencia, una cultura del encuentro y de la amistad social. Equidad va de la mano con cohesión social, o sea con la tarea de reconstruir los vehículos de pertenencia y solidaridad de las personas, con la reconstrucción del tejido familiar y social. (p. 87)
20. LOS IDOLOS DEL PODER, DINERO
¡Cuantas de nuestras riquezas naturales y humanas han sufrido el mismo destino! Las idolatrías del poder y del dinero, la explotación descontrolada de compañías multinacional, la avidez de la maximización de las ganancias, el mito de la auto-regulación del mercado, han ido dejando arrasadas e incluso desérticas, atentando contra la vida de comunidades campesinas e indígenas. Las grandes explotaciones mineras y la minería informal de los buscadores de oro y playa tienen, desde nuestros orígenes, grave responsabilidad en esta material. Se mueven en estos campos intereses tan poderosos que América Latina tiene el triste record de asesinatos de líderes ambientalistas, por lo general, campesinos e indigenistas. (p.93)
21. FINALIDAD DEMOCRATIZAR
La construcción de auténticas democracias es otra tarea histórica que la Independencia nos ha dejado pendiente. Esa tarea ha atravesado los largos ciclos de guerras civiles, las oposiciones enfrentadas entre centralismo y federalismos, la sucesión de golpes de Estado, los despotismo ''familiares'' y oligárquicos y los autoritarismos de toda laya, la terrible dialéctica entre violencias guerrilleras y represiones y sistemas liberticidas, las practicas aberrantes de asesinatos políticos, ''desapariciones'' y torturas, la degeneración terroristas de formaciones insurreccionales residuales aliadas al narcotráfico, y la capacidad d este último de envenenar y corromper la vida pública. Somos herederos de una fuerte inestabilidad y fragilidad de nuestras instituciones políticas. (p.95)
22. NUEVA POLITICA
Se necesita romper con los sistemas cerrados de luchas políticas auto-referenciales, liberarse de las esclavitudes de las idolatrías del poder a toda costa del mesianismo auto-asignados y alimentados, de las cadenas de corrupción para estrechar y condicionar voluntades y clientelas políticas. Se necesita reconstruir el tejido de partidos políticos, para que sean capaces de suscitar una participación organizada más amplia en la cosa pública, unos debates nacionales de más alto nivel ante los grandes problemas y desafíos que es preciso afrontar , así como formas de democracia interna y de recambios de dirigentes. (p.97)
23. LA SEGUNDA INDEPENDENCIA
Estamos pues, en mejores condiciones para reafirmar nuestra Segunda Independencia, ahora en condiciones de globalización y mundialización, de necesaria inter-dependencia y ampliación de redes de colaboración, siempre que seamos definir y fortalecer nuestros intereses e ideales comunes. Solo dales y religiosos, seremos un actor global. Solos, cada uno por su lado, no contamos nada o poca cosa. Y nada nos será regalado. Solo nos tomarán en serio si estamos unidos, conscientes de nuestros intereses e ideales. (p.103)
24. PAISES MARGINALES
En efecto, no habrá mayor independencia si no hay una mayor integración política, económica y cultural de América Latina. Nuestros países aislados, separados, incomunicados, están condenados a la derrota, a la marginalidad y a la violencia. Ni siquiera los grandes países latinoamericanos pueden vivir de ilusiones. Separados no tenemos otro destino que el de segmentos periféricos, empobrecidos y dependientes de los poderes
FBR: ¡Indígena!(p.103)
25. CONTINENTALIZACIÓN
Ya lo decía proféticamente Juan Domingo Perón: la regionalización o continentalizacion es pasaje obligado para la incorporación compensadora y adecuada en el proceso de mundialización. América Latina tiene que afrontar el reto de su integración y construcción —no se cansaba de repetir Alberto Methol Ferré—en esta ''nueva era de los Estados Continentales''. Estado Continental lo fue primero Estados Unidos, después de la Unión Soviética y lo intenta en Rusia de Putin. También emergen como ''estados continentales'' la China y la India… ¿Y por qué no entonces América Latina? (p.104)
26. ALIANZA PACIFICO
En los últimos años. Mientras el MERCOSUR se empataba, iba adquiriendo consistencia pragmática y una fuerte proyección estratégica la ''Alianza de Pacifico'' acuerdo de integración regional firmado en abril de 2011 entre Chile, Colombia, México y Perú con el objetivo de ''avanzar progresivamente hacia la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas'' entre los países miembros. El riesgo que tiene que ser superado es el de la desvertebración latinoamericana e incluso el de la interesada contraposición entre su consistencia atlántica y su proyección pacífica. Hay buenos signos de relacionamiento entre el Mercosur y la Alianza para el Pacífico que exigirían ser sometidos y profundizados por una visión solidaria de conjunto de América Latina
FBR: Los cristianos, más que la Iglesia (p.111) (p.108)