Elon Musk, a través de
SpaceX, acaba de poner en órbita su descapotable rojo con un muñeco dentro, lo
hace con el más poderoso cohete espacial existente, un Falcon. ¿Estamos en presencia
de una locura caprichosa?, de ningún modo, en todo caso se trataría de una poderosa
acción de marketing para remover conciencias financieras y lograr apoyos.
Musk está empeñado en colonizar
Marte y situar allí un millón de personas. Necesita dinero para investigar y
resolver algunos problemas planteados entre los cuales está el combustible, de
ida y de vuelta, los cohetes espaciales tienen que ser recuperables, la colonia
marciana necesita construirse bajo suelo mediante túneles… Quedarse en la Tierra
sería aceptar la extinción de la humanidad, cree que la Inteligencia Artificial
podría destruir la humanidad, dice que tal como enfocan la investigación las grandes corporaciones tecnológicas,
Facebook, Amazón, Google… podría convertir a los seres humanos en mascotas de
robots, y que provocará la próxima guerra mundial.
Elen Musk es una de
las figuras de las tecnológicas, es el Jefe, Director Ejecutivo, CEO, máximo
propietario de acciones de un grupo de empresas situadas en los sectores
aeroespacial, telecomunicaciones, tunelación, energético-solar, automoción y
transporte, inteligencia artificial (AI), neurociencia. Con el dinero obtenido
por el éxito de PayPal, montó un conglomerado empresarial que interrelaciona el
conjunto de investigaciones: SpaceX,
SolarCity, The Boring Company, Tesla, Hyperloop, OpenAI, Neuralink…
Musk no es un loco, el
cohete de SpaceX que acaba de situar su coche en órbita, forma parte del
proyecto de construcción de súper cohetes que sean recuperables, -dice que si
cada cohete fuera único no saldríamos de la Tierra, si cada vuelo de avión entre
Nueva York y París debiera cobrar el aparato a los pasajeros, por imposibilidad
de recuperar el avión, sería imposible-. A mediados de diciembre pasado el
cohete CRS-13 realizó la 13ª misión de reabastecimiento de la Estación Espacial
Internacional, SpaceX cobra a la NASA por estos servicios que aprovecha para
financiar sus investigaciones. A mediados de diciembre pasado el CRS-13 fue el
45 lanzamiento de un cohete Falcon de SpaceX, y recuperado totalmente. Hoy SpaceX
han logrado el sistema de lanzamiento espacial más barato del planeta.
Cada empresa trabaja
en su campo con visión y planes de largo plazo pero buscando utilidades a sus
avances en el corto plazo, y además entrelazan sus objetivos. Por ejemplo
SolarCity, desde 2004 trabajaba para implantar la energía solar ante el
agotamiento de combustibles fósiles, y las previsiones en EEUU del agotamiento
de ciclo de muchas centrales nucleares y de carbón que necesitarían enormes inversiones
para ser reactualizadas.
SolarCity practicaba
el arrendamiento solar mediante contrato situando las placas en los tejados de
granjas y ranchos. Su negocio fracasó, los ahorros que prometían los vendedores
no se obtenían realmente y en 2014 las cancelaciones de contratos fueron enormes,
comenzaron a bajar las acciones y fue absorbida por Tesla. El negocio no estaba
lo suficientemente maduro, no fue sobrepasado el umbral de fabricación de
placas e instalación para abaratar costos que lo hicieran rentable. Además del
peso de las dificultades impuestas por los lobbies energéticos e inmobiliarios.
Tesla: En 2003 monta
el segundo proyecto tras PayPal, pretende fabricar coches y camiones eléctricos, tiene
un problema a resolver, los puntos de carga, las baterías Powerwall instaladas en
edificios podría ser solución recargadas mediante placas solares en los tejados,
así se adaptó el negocio de SolarCity ofertando ahora instalar Solar Roof. Una
gran extensión de placas solares, abarataría enormemente sus costes y en los inmensos
territorios de EEUU podrían abastecer de energía limpia y barata a millones de
habitantes. Evidentemente los lobbies energéticos luchan para impedir que otros
les quiten sus negocios.
Musk es uno de los
capitanes de la investigación en IA inteligencia artificial, trabaja incorporándola
en los vehículos eléctricos Tesla, con resultados muy optimistas en vehículos
autónomos y controlados por teléfono móvil, -le llamas y pides q vaya a
buscarte, como si fuera tu chofer-. El problema de Tesla es que va muy lenta,
sus expectativas de fabricación de coches, camiones y Solar Roofs, no se
cumplen y sin aumentos considerables de cantidad no hay reducción de costes. Tesla
es un gran atractivo para el público, desde 2015 gana habitualmente premios
como Coche del Año en diferentes revistas, pero al tiempo es una pieza cotizada
por los especuladores de bolsa, los jugadores a corto pueden hacerla muchísimo
daño, apoyados en varios lobbies del ramo automovilístico, concesionarios,
estaciones de servicio, fabricantes. Las ideas seguirán valiendo, pero a futuro
serán de utilidad para otros, la empresa pueden hundirla en el presente, necesita
encontrar fuerte financiación para combatir a los especuladores y grupos de
presión.
Las variantes de vehículos
eléctricos autónomos le llevan a imaginar una circulación por túneles, de aquí
el interés por la tunelación y el abaratamiento de costes, el papel de The
Boring Company. Sería posible bajar muchísimo los costes de construcción de túneles
al reducir el tamaño de los mismos porque los vehículos circulantes fueran
menores y lo hicieran mediante electricidad, suprimirían la necesidad de
extractores y purificadores de aire, lo cual reduciría tamaño y
consiguientemente costes. La idea de trazar rutas subterráneas en grandes
aglomeraciones humanas como por ejemplo la costa Este u Oeste forma parte de
sus proyectos.
Continuará