



En Suecia, concretamente en Gotemburgo, encontramos este precioso apartamento, de 49 m2, que se caracteriza principalmente por su colorido.
Podemos ver como se conserva el encanto del siglo, gracias a los pisos de madera, las molduras perfiladas, los nichos de las ventanas profundas y el techo de estuco.
Pero como ya hemos mencionado anteriormente, la abundancia del color es lo que hace especial a este apartamento, ya que, posee toques inesperados de color verde, azul, naranja y amarillo, que se encuentran en todas las direcciones.
Es adecuado mencionar su comodidad, porque desde el hall de la entrada puedes dirigirte tanto a la cocina, a la sala de estar o girarte hacia la izquierda en dirección al cómodo y acogedor dormitorio.
Además, encontramos grandes ventanas que proporcionan mucha luz natural a la vivienda, sin contar con el precioso patio.
Finalmente, llegamos al balcón, un lugar que está orientado hacia el sur y le otorga una dimensión adicional al apartamento, donde sus inquilinos podrán disfrutar de un ambiente tranquilo, para descansar, leer, o cualquier actividad que crean conveniente.
Fuente Orginal: Freshome














