Desde muy pequeño en el colegio me contaron un cuento llamado 'Historia de Cataluña', un cuento que mis profesores de historia narraban con ciertos tintes nacionalistas y datos irreales dignos de una película de Walt Disney.
Yo estudié ese cuento para aprobar mis estudios pero nunca compartí lo que me habían obligado a saber como un robot.En ningún colegio de Cataluña me dieron la oportunidad de conocer la auténtica historia de mi comunidad autónoma o de mi país. Ésta la tuve que aprender de forma autodidacta.Por mi aniversario mi mujer me ha regalado uno de los libros que deseaba tener en mi biblioteca personal, "La Corona de Aragón" de José Luis Corral.Es un gran libro escrito por un arqueólogo y catedrático de Historia Medieval que desmonta todas las falacias que han estado vendiendo los políticos nacionalistas en Cataluña, mentiras que han utilizado para adoctrinar a una sociedad durante años, hipnotizarlos y poder seguir viviendo del cuento sin afrontar los auténticos problemas de los catalanes.La revista francesa "Actualité de l'Histoire", ha considerado a José Luis Corral como uno de los historiadores españoles de mayor repercusión internacional.Creo que nuestro país no aprende de los errores del pasado. No aprendimos de una dictadura absurda que causó tantas muertes injustas por ambos bandos y lo peor de todo, es ver como personas que no vivieron esos duros años, copian los mismos gestos, discursos e incluso defienden ideales que desconocen por completo.¿Dictadura en el 2015? no señores, aunque muchos "intelectuales de universidad" de puños en alto se empeñen en vender que vivimos en una dictadura, siento decirles que no vivimos en una dictadura, ni mucho menos. Vivimos en una etapa de nuestra historia que necesita grandes cambios, como los que consiguieron en 1978 políticos tan diferentes ideológicamente pero con objetivos compartidos.Estamos hartos de los patrioteros con corbatas de toda la vida, que lo único que les importa es seguir viviendo a nuestra costa ya que carecen de aptitudes para ejercer cualquier otro tipo de trabajo que no sea político o dirigir la empresa heredada del papá y así, poder hablar de inmigración y desempleo desde el chalet de la sierra con un buen copazo de vino, servido como no, por la 'chica de servicio' extranjera que cobra en negro.Tampoco queremos a pseudo actores ni "intelectuales de universidad" representando a un pueblo engañado con discursos utópicos.En las próximas elecciones tenemos en nuestras manos la oportunidad de demostrar a toda esta clase política que estamos cansados de ellos, que no creemos en su palabrería barata y que la calidad de vida de una persona es más importante que la suma de todas las banderas, signos, símbolos, ideologías y naciones juntas.Es tiempo de hacer política de verdad, de elegir a gobernantes serios, honrados y sobre todo, es tiempo de elegir a políticos que sepan escuchar, dialogar y trabajar por y para el pueblo.Hace años me dijeron que para abrir un libro no hacía falta ir a una universidad, que no esperara hacerme millonario trabajando y que me conformase con ser una persona íntegra, luchadora y feliz. Que aprendiera cada día y que tuviera mi propio criterio, que lo defendiera con convicción y fuera fiel a mis principios.Creo que no hay que 'pasar' de la política, porque los políticos son el claro reflejo de una sociedad y la nuestra, necesita un cambio drástico y contundente.Ese cambio solo lo podremos conseguir los ciudadanos que cada día nos levantamos con sueños, problemas reales, inquietudes y ganas de luchar por un futuro mejor que nadie nos va a regalar.Si 'pasas' de la política, la política pasará de ti y te convertirás en un simple peón de una absurda partida de ajedrez donde siempre ganan los mismos.