Durante
la edad media, -Y en España
hasta finales del siglo XX, el campesino estaba inscrito a la tierra,
eran siervos, eran como los conejos que vivían en el bosque, vivían en la tierra y la
trabajaban, el empleador los poseía y los cuidaba como a una mula de carga,
cuando estaba enferma pagaba al veterinario y la azotaba cuando tenía que
rendir. Era una asociación vital, fueras listo, tonto, enfermo, útil, viejo,
joven. Allí pertenecías y allí morías. -Mas valía que te tocara un señor bueno, aún recuerdo a mi tía
Dolores, lo agradecida que estaba con sus "amos". Luego
aparecieron los jornaleros, trabajadores independientes que vendían su tiempo a
temporadas, por lo que el empleador ya no tenía que mantener al tonto, al
viejo, al enfermo, al inútil, solamente necesitaba al sano y fuerte, y no todo
el tiempo, sino solamente cuando "había faena" Así es como nació la selección de
personal.
En la
actualidad la historia se repite, con sus matices claro, la revolución
francesa, la democracia, sentó las bases para un estado fuerte al servicio del
pueblo, creando organizaciones grandes y fuertes en las que vivir y trabajar. En
el ámbito privado sucedió algo parecido, la revolución industrial creó grandes
empresas que daban trabajo a muchísimas personas y por mucho tiempo. En la
actualidad el mercado de trabajo a expulsado a millones de personas que se van
a convertir y se están convirtiendo en jornaleros. Jornaleros que se van a
contratar por temporadas, en minijobs, y solamente a los sanos, fuertes y
baratos. Pero como te has
levantado hoy Pedro, sería mejor que te acostaras otra vez. -Déjame
terminar...
De
aquellos jornaleros, nacieron pequeños propietarios, comerciantes, artesanos, lo
que se llamaría la burguesía. Trabajadores autónomos que vendían sus productos
al mejor postor. Nos encontramos en este paso; millones de siervos expulsados
de la tierra, sin jornal y que todavía no se han convertido en burgueses. -Menos mal que tenemos unos
servicios sociales muy buenos en España, hay que cuidarlos, de lo contrario
correría la sangre. De ahí todo el empeño en emprender, emprender,
emprender.
Muchos
buscadores de empleo seguimos buscando una empresa, un "terrateniente",
que nos acoja en sus tierras, otros buscamos un proyecto, un trabajo de
temporada y muchos nos conformamos con unas horas, un mini-job, que está de moda.
Las
empresas se han reducido a la mínima expresión y no tienen volumen de tarea
para contratar a una persona completa, pero siguen necesitando intervenciones
concretas y breves, siguen teniendo problemas. Tenemos que solucionar estos
problemas, vamos a vender servicios o productos, que solucionen las necesidades
de otros. Igual que se divide el tiempo de trabajo en contratos temporales,
también se tienen que vender servicios puntuales que solucionen los problemas
que perciban los empleadores. Se produce una atomización temporal y una funcional.
Nos
rompemos en piezas y hacemos que cada una funcione independiente, que sea una
solución. Nuestro currículum, nuestra comunicación profesional tiene que estar llena de soluciones, para resolver los
problemas de los demás. No puedo pensar en mi desarrollo profesional, debo
pensar qué problemas tienen mis clientes, ofrecerles soluciones y desarrollarme
en sincronía con lo que van necesitando. Al cliente no le interesa saber que sabes colocar teja árabe, al
cliente le interesa, que tienes la solución a las goteras.
-¿Cómo percibe el cliente los
problemas? Una gran pregunta y fundamental si queremos conectar con él,
pero esta es otra historia.
Espero
que os haya gustado, si así ha sido, compartidlo. Muchas gracias una semana
más.
El enigma de la foto:
Este es un juego que os propongo
cada semana, cada artículo tiene una foto y os pido una interpretación, (a
responder durante la semana) la que se os ocurra, nada está bien o mal,
nada es incorrecto, yo a la semana siguiente os cuento, por qué razón la he
puesto en el artículo: Motivaciones básicas.
Esta es la
foto de la semana pasada:
Su
interpretación.
Tenemos una florecita que ha caído
en el agua, está atrapada, totalmente a merced de la corriente. Sus funciones
totalmente anuladas por las circunstancias. Sus estambres, su pistilo sumergido
son inútiles, nunca llegará a cumplir su meta en la vida, sin capacidad de
reacción, morirá sumergida por las circunstancias. Pero no somos flores, somos
hombres con capacidad pensamiento y acción. Lo que hagamos y pensemos
determinará qué podemos hacer y qué podemos pensar. -Elige bien.
¿Os atrevéis con la de esta semana? Son los molinos del Picazo, en la Autovía de Valencia- Ciudad Real.