Bueno, ayer vivimos tras 8 años después, otra huelga general. Donde grandes colectivos de trabajadores, hemos querido demostrar nuestro enfado y nuestra protesta ante el despropósito que quieren lanzar las fuerzas políticas contra los trabajadores. Una de las conclusiones que he llegado a sacar es que en mi barrio, ha sido otro día normal. Otra jornada cualquiera (a excepción de que los barrenderos no han salido a barrer las calles, ni el cartero a traer la facturas del banco a los bufones, ehhh... no he querido decir buzones), el panadero ha despachado su pan, el frutero la fruta. El peluquero a teñir, cortar y lavar el pelo, sobretodo a marujas, el del kiosko pues a endulzar la triste amargura El supermercado ha abierto como si de un día normal se tratara y muchos son los trabajadores que han cogido sus vehículos para hacer una jornada normal, sin que esto de la huelga ni les viene ni les va. En un principio uno no sabe bien por que se pasan tan a la alegre la huelga y dicen cosas, como... si no trabajo hoy, no podre comer mañana, Pardiez! ojala yo trabajase un día al mes y ya tuviese todo el resto cubierto. Esto me esta dando a demostrar que somos como un rebaño de ovejas, que unicamente nos estamos pisando los unos contra los otros. Como si de una cadena de cualquier matadero... o de algún palacio donde muere el rey y seguidamente va otro. El odio, nos seguirá corrompiendo totalmente por dentro. Pero yo creo que lo mejor que tendríamos que hacer es la huelga esa que suelen hacer los trabajadores asiáticos. Ir a nuestro puesto de trabajo y trabajar muchísimo más, seguramente a los que han ido hoy a trabajar (porque ellos hayan querido) les encantara esta propuesta. Que nos privan de la seguridad social... tres horas de trabajo gratis más al día y ya veras como nos vamos a reír, que cuando nos despidan nos demos cuenta que nos han quitado el subsidio del paro, 4 horas más gratis al día, ya veras como vamos a mosquear a la patronal.
Hay quien dice que esta huelga viene tarde, y en eso le doy totalmente la razón, pero aunque esta huelga hubiese llegado hace 3 años, los que ayer fueron a trabajar, también habrían ido hace tres años. ¿Solidaridad en este país? diría que la justa, pero ni eso. Damos más importancia a cosas que no nos va ha hacer mejor la vida, pero cuando tenemos que dar un paso para luchar por nuestros derechos... pasamos de ello, preferimos vivir con al pan de cada día, aunque para mañana ya no lo tengamos...
Bob Dylan, Joan Baez y muchos otros músico apostaron por un cambio generacional que fuese más luchador. Que saliese a defender sus derechos...pero la respuesta la seguiremos encontrando en el viento.
Revista Música
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