Un día en Nantes de la mano de Julio Verne

“Solo pido vivir aun 100 años más para poder recordarte más tiempo” (Julio Verne).

En la confluencia entre el Loira y el Erdre se sitúa la siguiente parada de nuestra ruta por Francia. No es una ciudad que tuviéramos en mente a la hora de hacer nuestro recorrido, tan solo la contemplábamos como un alto más en nuestro camino para poder dormir en un lugar intermedio entre dos puntos (concretamente entre st.michel y burdeos), y la verdad es que nos alegramos de haberlo hecho porque Nantes nos transportó dentro de un cuento al más puro estilo de Julio Verne y al exótico Japón en cuestión de minutos.

Antes de comenzar os dejamos con un mapa señalizando los puntos que os recomendamos visitar de esta curiosa ciudad (sigue nuestras patitas de gato), también podéis ver otros lugares de interés que nos recomienda les petits nantais en un segundo plano (ruta verde).

1. CASTILLO DE LOS DUQUES DE BRETAÑA: No podía faltar otro castillo, aunque después de ver el Castillo de Chenonceau este nos supo a poco. Igualmente es bastante bonito asique si estáis en Nantes no dudéis en acercaros aunque sea a caminar alrededor del foro, mirad las ventanas por las que se asomaban los arqueros y la muralla, muy bien conservada, que mantenía fuera a las tropas enemigas.

2. CATEDRAL DE ST PIERRE ET ST PAUL: Tengo que confesar que no tenía especial interés por visitarla, ¡pero qué equivocada estaba! Quizás por fuera no sea nada espectacular pero dentro se encuentra una de las obras que más tiempo me he tirado fotografiando dentro de una iglesia, seguramente no os parezca gran cosa pero fue un flechazo, cada detalle, cada rincón, cada vez que lo miraba descubría algo nuevo, estoy hablando del sarcófago y las estatuas yacentes de la tumba de Francisco II y Margarita de Foix.

Las 4 estatuas que se sitúan en cada ángulo de la tumba representan las 4 virtudes cardinales, indicadoras del camino que Francisco II (y el resto de mortales) debían seguir.

La templanza sujeta una correa de caballo en la mano derecha símbolo del comportamiento racional, mientras que con la izquierda sujeta un reloj que nos indica que debemos respetar y atenuar las pasiones y medir cualquier tipo de exceso. La templanza recuerda que tienes que tener un equilibrio adecuado.

La prudencia sujeta con la mano derecha un compás que mide nuestros actos, y con la izquierda empuña un espejo donde se reflejan sus defectos y debilidades, cualidades que tendrá que mejorar. Si nos fijamos más de cerca esta estatua tiene doble cara, por delante es una joven hermosa y por detrás un anciano para recordarnos que hay que aprender de la experiencia y los sabios consejos que nos puede ofrecer la edad.

La justicia sostiene en una mano el libro de la ley con la balanza y en la otra una espada para imponer la verdad, aunque es importante el detalle de la punta de la espada cubierta por un paño, y es que, a pesar de querer imponer la justicia, lo quiere hacer con delicadeza, sin destruir a la persona.

La fuerza está representada con un traje de armadura, es una guerrera, esta estatua está arrancando al dragón (el mal) de dentro de una torre (el  bien), esto simboliza que la fuerza de la moral triunfa sobre el vicio y la tentación. La muestra de dolor en su rostro refleja que la pelea con el dragón se hizo también con lucha interior.

3. PASSAGE POMMERAYE: Si habéis estado en Amberes y habéis visitado su estación, esta galería comercial es muy del estilo. La galería une dos barrios gracias a sus 134 metros de longitud. Forjada en hierro, madera y vidrio los detalles son infinitos, lámparas, estatuas que representan sectores como el comercio o la agricultura o un techo de cristal son varias de las cosas que hacen tan atractivo al lugar. No os perdáis las vistas desde lo alto de la escalera.

4. LES MACHINES DE L´ILE: El sitio más original de Nantes, la guarida de su robot gigante con forma de elefante. Desde luego es una gran sorpresa, jamás te imaginas encontrarte algo así cuando visitas la coqueta ciudad de Nantes. Puedes subirte a lomos de este curioso elefante de metal que sale a pasear tan solo a unas pocas horas del día, os recomiendo que visitéis la página oficial para enteraros bien de los horarios.

Verlo desde abajo sin estar subido a su lomo ya es espectacular, como mueve cada parte de su cuerpo, como ruge, como menea las orejas, como pestañea o como echa agua por la trompa ¡es alucinante! Sobre todo cuando sabes que esos 12 metros de alto y 8 metros de largo pesan nada más y nada menos que casi ¡50 toneladas!

Si viajáis con niños creo que es muy buena opción que entréis a la exposición de las máquinas inspiradas en el mundo de Julio Verne, hay multitud de ellas para jugar e interactuar.

Os dejo por aquí un video en instagram que grabamos durante nuestra visita a Nantes.

5. LE LIEU UNIQUE: O como seguramente más de uno de vosotros lo conocerá, LU, si, si, la de las galletas, de aquí proviene esta marca de la infancia de más de uno. Hoy ya no sirve de fábrica pero se sigue conservando su torre como centro de arte moderno, local de restaurantes, bibliotecas, teatro, etc…

6. ISLA DE VERSALLES: Y hablando de cosas originales ¿quien no quiere viajar a Japón sin recorrer miles de kilómetros? Si, de acuerdo, sé que no es lo mismo, pero en las afueras de Nantes hay un jardín de estilo japonés precioso.

Este jardín lleno de plantas exóticas, ríos que cruzar saltando de piedra en piedra, cascadas y casetas tradicionales, es ideal para hacer un alto en el camino y relajarte.

7. HOTEL ASTORIA: Por último hablaros de dónde dormimos en esta parte del recorrido en la ruta francesa. Elegimos este hotel por su cercanía al centro y por su limpieza, el trato no pudo ser mejor ya que habíamos reservado una habitación de 4 de peores condiciones y nos re-alojaron de forma gratuita a dos habitaciones dobles recién reformadas.

Como única pega el baño, la ducha es de esas que no tiene separación con el resto del servicio y acabas haciendo una piscina, en Carcassonne también nos ocurrió asique entiendo que en Francia es un recurso típico para ahorrar espacio en el baño. También es verdad que la otra habitación tenía bañera por lo que este problema este problema no existía.

Nos costó (precio 2014) 98 € en total (24,5€ por persona la noche), lo recomiendo sin duda alguna.

Y una última recomendación, si vais a conducir por Nantes… armaros de paciencia, las rotondas son círculos pintados en el suelo, conducen como locos, no tienen miramientos con el resto de coches que circulan junto a ellos y las indicaciones en las carreteras son pésimas y confusas, nos llevó 15 minutos poder acceder a un desvío para salir de la ciudad porque no éramos capaces de dar con el acceso a ella ni con ayuda del GPS, lo dicho, paciencia.

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