Con 53 años, 3 hijos y 2 nietos a su cargo, un 67% de discapacidad y una pensión no contributiva de poco más de 300 euros para alimentar todas estas bocas, José Luis Córdoba se queja de que el Ayuntamiento haya retirado la tarifa especial para acceder a las piscinas de verano de la que, hasta ahora, se beneficiaba el colectivo.
Acaba de entrar en vigor la modificación de la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa por el uso y la prestación de servicos en las Instalaciones Deportivas y Piscinas Municipales y la realización de actividades de carácter deportivo. Y si polémica fue cuando se tramitó —los clubes denunciaron que las tasas “atentaban contra el deporte base”—, su aprobación definitiva ha pillado a ciudadanos, como José Luis Córdoba, desprevenidos y en una situación —se queja— de “indefensión”. Este hombre de 53 años tiene una discapacidad del 67%: “Soy minusválido físico, sensorial, tengo el aparato digestivo hecho polvo y sufro desde hace cuatro años una depresión”. Cuenta que, hasta ahora, por ser discapacitado, cuando iba a las piscinas municipales de verano, se beneficiaba de la misma tarifa reducida que tenían “pensionista y jubilados”. De hecho, el domingo, incluso, pagó un euro por entrar a la de Las Fuentezuelas. Pero la situación ha cambiado en tan solo dos días.
Desde el martes, el concepto “pensionistas y jubilados” ya no existe. Ahora, se habla de “acceso para mayores de 65 años” y el precio especial de un euro ya no abarca también a los discapacitados. “Desde esta semana, la entrada simple nos va a costar 4 euros, lo mismo que a cualquier adulto, y es una injusticia, sobre todo, con los impuestos que ya pagamos”, denuncia José Luis, que, en dos ocasiones, ha intentado en vano presentar hojas de reclamaciones. Con tres hijos a su cargo y dos nietos, la familia de José Luis vive de la pensión no contributiva que este percibe. Son poco más de 300 euros, señala. Y este dinero tiene que cubrir también el alquiler de la vivienda. “Mi situación económica es crítica”, se lamenta, y pregunta, retóricamente, después, antes de advertir que está dispuesto a movilizarse: “¿Cómo pueden subir el precio?”. Fuentes municipales negaron que existiera una tarifa específica para discapacitados y apuntaron que, si se les cobraba como a pensionistas y jubilados, era porque no estaba regulado.
http://www.diariojaen.es/index.php/menujaen/25-notlocales/65711-un-discapacitado-critica-el-coste-de-entrar-a-la-piscina
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Revista Solidaridad
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