La adicción al tabaco se ha convertido en un verdadero problema para muchos fumadores que con el paso de los años se arrepienten de haber empezado a fumar. Sin duda, dejar el tabaco implica una enorme fuerza de voluntad. Pero ahora que ha empezado el nuevo año es buen momento para realizar propósitos tan saludables como decir adiós al humo que produce el tabaco. Sin duda, cualquier fumador debería evitar fumar en el propio hogar puesto que el olor que produce el cigarro es muy poco agradable y muy poco saludable.
Pero además, en el 2011 se hace vigente la ley antitabaco en España que garantizará un espacio sin humos en bares y restaurantes. Se trata de una medida que ha producido reacciones de todo tipo. Muchos fumadores consideran que esta medida es extrema, sin embargo, se trata de una ley que seguro que producirá beneficios muy positivos sobre la salud de la población. Por ejemplo, hasta ahora, muchos camareros que no eran fumadores respiraban el ambiente contaminado de tabaco del restaurante o del bar en el que trabajaban día tras día. Los médicos y especialista informan con frecuencia de los riesgos que sufre el fumador pasivo.
El tabaco es un hábito muy poco saludable no sólo a nivel físico sino también emocional puesto que produce dependencia en el fumador. Una dependencia que puede ser mayor o menor y que, por tanto, puede darse en diverso grado. Sin embargo, cualquier dependencia es una forma de limitación y de esclavitud que roba libertad y capacidad de decisión.
Por ejemplo, algunos estudiantes de universidad tienen la necesidad de fumar un cigarro en el descanso entre una clase y otra. Otros fumadores incluso encienden un cigarro nada más levantarse por la mañana, sin haber desayunado. Hace décadas, fumar era un signo de prestigio y distinción como bien muestran algunas películas de la historia del cine. Sin embargo, hoy día, fumar es un hábito nocivo y poco saludable.