Dos clubes deportivos más o menos similares, pero que recibieron un trato bien distinto por parte del Consistorio. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de la Comunidad Valenciana ha anulado las bases de ejecución del presupuesto municipal del área de Deportes del año 2011 y, con ellas, las subvenciones que el gobierno local otorgó a dos clubes de fútbol locales: la Fundación Ciudad de Benidorm Fútbol Base, presidida por Miguel Águila –quien era y sigue siendo cargo de confianza del PSOE en el Consistorio–, y la Fundación de la Comunidad Valenciana Benidorm Fútbol Base, que dirige el dueño del Colegio Lope de Vega, Vicente Fuster.La sentencia, dictada por la Sección Quinta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, y contra la que aún cabe recurso ante el Tribunal Supremo, atiende de esta forma una demanda interpuesta por el representante de la segunda entidad, la Fundación Benidorm Fútbol Base, al considerar «arbitrario e injusto» el reparto de subvenciones municipales realizadas por el Ayuntamiento.Como ya contó en su día este diario y queda recogido en el fallo del TSJ, de los 913.050 euros que el Ayuntamiento concedió en 2011 en subvenciones deportivas, el equipo de gobierno local destinó una de 161.000 euros al club de fútbol base Ciudad de Benidorm, a cuyo frente había una persona de la total confianza del entonces edil de Deportes, Juan Ramón Martínez. Frente a esta ayuda, que se otorgó de forma directa, la fundación Benidorm Fútbol Base, impulsora de la demanda, recibió únicamente de las arcas públicas una subvención de 6.000 euros; esto es, casi treinta veces menos que su «rival», pese a disponer por aquel entonces «prácticamente del mismo número de alumnos», como expuso ante los tribunales. Con todo, del total de fondos para fomentar este deporte, la distribución quedó repartida en un 96,41%-3,59% entre los dos clubes.Tras constatar toda la documentación aportada, la sala del TSJ reconoce que «existe una clara disonancia» entre ambas cuantías y, además, reprocha al Ayuntamiento su «absoluto silencio alegatorio» a la hora de contestar la demanda. También cuestiona la repetida concesión de subvenciones directas y nominativas. O, dicho de otra forma, sin la «concurrencia competitiva» que exige la ley y, por tanto, sin que existan los preceptos de igualdad, transparencia u objetividad.Por todo ello, la sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJ anula las bases del presupuesto de 2011 en lo que respecta al apartado de Deportes y da al Consistorio un plazo de ocho meses para elaborar una ordenanza general que regule la concesión de subvenciones. A partir de ahí, el Ayuntamiento tendrá otros tres meses de plazo para publicar una nueva convocatoria de subvenciones públicas y otros seis para que resuelva la concesión de las nuevas ayudas en función de las solicitudes que se hayan presentado.¿Qué pasará con el dinero?
La sentencia del TSJ no entra a indicar qué pasará con el dinero de las subvenciones que los distintos clubes locales cobraron en su día, que es ahora la principal incógnita que se abre tras la anulación de las bases de ejecución del presupuesto por las que se concedieron. Tampoco dice cómo deberán quedar distribuidas las que afectan concretamente a estos dos clubes de fútbol base, a pesar de que el demandante pedía que se le otorgase la misma cuantía que al Ciudad de Benidorm o 71.810 euros.A falta de informes que lo concreten, fuentes municipales indicaron ayer que una de las posibilidades podría pasar por que esta fundación tuviera que devolver parte de los fondos percibidos o, por el contrario, que el Ayuntamiento tenga que incrementar la partida económica para «compensar» a la demandante.El grupo municipal del PP reclamó al alcalde que los técnicos informen «de inmediato» sobre este asunto. El edil Lorenzo Medina dijo, además, que éste es un ejemplo más de «las malas formas con las que nos gobiernan».http://www.diarioinformacion.comFutbol Base y mas