Un frió espeluznante

Mi día hoy, solo ha ido de mal en peor.

Hoy tenia que acudir a una presentación, que mi consultora de Mary Kay hacia, en la que presentaban nuevos productos, nos enseñaban un maquillaje de día y daban un lunch.Era el momento perfecto para reponer mis productos, que andan en las ultimas. Por desgracia no he podido ir y me ha dado una rabia increíble.

Mas tarde he tenido que ir a por mi coche. Yo vivo en el monte. Lo bueno de esto es que disfrutamos de unas vistas y una tranquilidad increíble, lo malo es que cuando hacen días como hoy en los que los meteorólogos pronostican nieve, no puedes arriesgarte a no creértelo. Así que para no arriesgarme, decidí dejar el coche en la calle para no arriesgarme a no poder sacarlo.

Para el desastre del siglo, subí a buscarlo en pijama, sudadera, gafas y botas de pelo. Desastrosa si… Lo “gracioso” (que para mi en el momento no lo era tanto, fue que al ir a arrancar el coche… ¡Se habia quedado sin batería! Así que probablemente una media hora me he tirado en la calle en pijama mientras nevaba, con mi padre poniéndole las pinzas al coche.

Ahora pensándolo me hace gracia, pero en el momento… ¡¡¡Que frio!!! Yo que hoy iba a hablar sobre otra cosa, me ha parecido tan anecdotico y desastroso, que tenia que escribirlo.

Aparte de que todos los que se estén riendo al imaginarse la escena en la cabeza… os habéis perdido verlo. La moraleja de esta historia, es que no importa lo que vayas a hacer ni lo que vayas a tardar en hacerlo, siempre sal preparado.

Bueno yo marcho a por una batería nueva.

Buen día y disfrutar de la nieve.

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