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Un futuro para la desintoxicación. Combatir las adicciones

Publicado el 18 junio 2022 por Johnny Zuri @johnnyzuri
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Alternativas para desintoxicar el cuerpo. Un futuro para la desintoxicación y la recuperación de adicciones

Las nuevas tecnologías se pueden utilizar para mejorar la salud mental. También se están convirtiendo en herramientas muy útiles para proporcionar y/o mejorar la aplicación de los servicios terapéuticos. Cuando buscamos clinica de desintoxicacion precio queremos encontrar la respuesta a nuestras demandas de precio para un problema de adicciones, una respuesta en forma de desintoxicación. Y hoy las respuestas las encontramos en la aplicación de tecnología y técnicas tanto para la salud mental como para el tratamiento de adicciones. Todo esto gracias en parte a la recopilación de cantidades masivas de datos que brindan a los profesionales conocimientos clínicos significativos. Queremos saberlo todo acerca del futuro de la desintoxicación y buscamos, en esta ocasión centro de desintoxicacion girona, y estas son nuestras conclusiones… 

Alternativas para desintoxicar el cuerpo. Un futuro para la desintoxicación y la recuperación de adiccionesAlternativas para desintoxicar el cuerpo. Un futuro para la desintoxicación y la recuperación de adicciones

En un post anterior ya habíamos hablado de aplicaciones específicas, para el tratamiento de las adicciones. Por otro lado, ya hemos conocido que la estimulación magnética transcraneal es una técnica que actúa directamente sobre la parte más biológica de la adicción a la cocaína y activa las neuronas de las zonas que controlan el deseo de consumir y por tanto reducirlo. Y como nos informan también cuando buscamos clinica de desintoxicacion lleida, el uso de técnicas de realidad virtual, o realidad aumentada, también son herramientas que pueden dar buenos resultados en el aprendizaje para detectar y gestionar situaciones de riesgo de consumo.

Consenso en la comunidad científica

El reconocimiento de la adicción a Internet y las nuevas tecnologías es un hecho en la comunidad científica. Casi todos los científicos reconocen que este tipo de adicciones es un problema cada vez más común, que debe ser abordado con principios preventivos y terapéuticos, además de fortalecer la investigación en un campo en evolución. Nuestra búsqueda de centro de desintoxicacion tarragona nos lleva a profesionales que inciden también en subrayar esto último.

Además se muestran conscientes de que las leyes y la ciencia van a la zaga de la tecnología, y es muy difícil prever las consecuencias de su uso descontrolado, pero está claro que es necesario abrir el debate sobre el estado actual de las adicciones tecnológicas, que afectan cada vez más a los jóvenes, fundamentalmente.

Adicción a la cocaína.

Los drogadictos del siglo XXI no son como los del siglo pasado, ahora pasan desapercibidos entre nosotros, sin embargo los estereotipos siguen operando y a veces vemos drogadictos donde no los hay. Los drogodependientes han cambiado, sus hábitos de consumo y sus tratamientos también.

Adicción a las Redes Sociales

En las redes sociales, solo proyectamos positivo. Si has tenido un mal día y estás decaído, te conectas a las redes y compensas esa frustración con la sensación de popularidad que crees que transmites en las redes.

Adicción al sexo.

En la mayoría de los casos, esta dependencia se confunde con una compulsión de conquista, que casi siempre va acompañada de dificultad en las relaciones íntimas. Los drogodependientes pueden tener problemas profesionales, familiares, económicos y sociales. Su deseo sexual excesivo y compulsivo los obliga a visitar burdeles con más frecuencia de lo que se pueden permitir económicamente, o comprar artículos pornográficos sin medida, y hacer que su vida gire en torno al sexo.

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Adicción al trabajo.

Son personas cuya vida gira en torno al mundo profesional.

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Adicción a la tecnología

Las nuevas tecnologías, como el teléfono móvil, Internet o los videojuegos, han producido una revolución social principalmente porque ofrecen posibilidades en nuestra vida cotidiana impensables hasta hace poco tiempo. Con la llegada de estas herramientas, la forma de comunicarse, mantener relaciones y divertirse en la sociedad en su conjunto está cambiando, pero especialmente entre los más jóvenes. Cuando el uso excesivo de las nuevas tecnologías genera una adicción, se considera, según la psiquiatría, como una adicción denominada no tóxica o conductual.

Son comportamientos agradables y repetitivos al principio pero que terminan generando una pérdida de control. A través de los testimonios de algunos de estos drogodependientes, hay un documental que explora el lado más oscuro de las nuevas tecnologías, mostrando cómo su abuso genera adicciones con características muy similares a las relacionadas con las drogas.

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Cómo frenar el auge de las adicciones.

Sanidad impone un nuevo control a los opioides más potentes para frenar el auge de las adicciones. El Departamento de Salud y las Comunidades Autónomas han impuesto un escrutinio especial a los nuevos tratamientos con fentanilo de liberación rápida, una fórmula instantánea para aliviar el dolor que es 100 veces más potente que la morfina, para detener el aumento de la adicción a los analgésicos.

La medida está incluida en el nuevo Plan de Opioides, aunque su entrada en vigor se ha adelantado al 1 de julio sin que se haya producido hasta el momento. El objetivo es limitar el uso de estos medicamentos solo a pacientes con cáncer que sufren ataques de dolor irruptivo. El plan es el resultado de más de dos años de trabajo que se ha visto frenado por la pandemia y que se inició por el aumento de casos de abuso y adicciones más poderosas.

Debemos mejorar la administración de estos fármacos y el seguimiento de los pacientes, pero también ser conscientes de que los opioides son la única alternativa terapéutica para muchos pacientes. Eso significa hacerlo sin dolor, aunque hay que hacerlo correctamente para maximizar los beneficios y minimizar los riesgos.

Sin embargo, es el creciente consumo de fentanilo de liberación inmediata lo que ha suscitado importantes preocupaciones sobre su uso fuera de las indicaciones autorizadas. Según el documento del Plan, el consumo de los principales opioides aumentó entre 2013 y 2019 de 3,57 a 5,42 dosis diarias definidas por cada 1.000 habitantes.

En España no se han hecho públicos datos que midan la magnitud del problema de las adicciones y las muertes provocadas por el abuso de opioides. Uno de los primeros estudios que lo intentó fue presentado en 2019. Pero según el Plan, entre el 11% y el 17% de la población sufre dolores crónicos no relacionados con el cáncer y las causas más frecuentes son la artrosis, la lumbalgia, la cervicalgia y las migrañas o dolores de cabeza. El consumo de este tipo de opioides off-label asciende ya al 27% de todas las prescripciones, según el documento, que no ofrece datos más precisos.


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