Un gato perdió una de sus siete vidas cuando se lanzó desde un viaducto y sobrevivió.
Según informa Daily Mail Online, Gus, un preciso gato de color canela, se rompió una pata al caer desde una altura de 21 metros cuando saltó desde un viaducto en Frampton Mansell, Gloucestershire, al oeste de Inglaterra, pero se las arregló para arrastrarse hasta la seguridad que le proporcionaba un remolque cercano.
El gato de 18 meses de edad, se salvó de una muerte segura gracias a que los gusanos que mordisqueaban la carne necrosada de su pierna rota previnieron el envenenamiento de la sangre.
Fue descubierto seis días después de la caída por un perro que llamó la atención de su propietaria, Caroline Bush, de 39 años, mientras lo buscaban tras un aviso.
Bus, el afortunado gato, de nuevo con su familia.
La señora Bush llevó rápidamente a Gus al Hospital Veterinario Clockhouse en Wallbridge, Glos., donde el personal se mostraba muy escéptico acerca de las posibilidades supervivencia del felino.
Pero, sorprendentemente, Gus, a pesar de su débil estado, soportó la operación en la que le amputaron la pata y es feliz de nuevo con su familia.
Caroline dijo: "Recibimos una llamada telefónica de un señor que creía haber visto a nuestro gato debajo de su remolque. Hacía unos días que no lo veíamos, así que fuimos directamente allí."
Añadir leyenda
"Tenía la pierna podrida. Era como una una marchita piel de plátano."
"Los veterinarios dijeron que nunca habían visto una lesión tan horrible y que el animal hubiera sobrevivido, por lo que sugirió que los niños vinieran a despedirse de él".
"Había pasado seis días sin comida ni agua y estaba tan débil que tuvo que esperar un día antes de que pudiera ser operado."
"Le amputaron su pata, pero afortunadamente el gato sobrevivió"
"Nos dijeron que los gusanos que se habían estado alimentando del tejido muerto de su pata le habían salvado la vida, ya que se habían comido toda la carne muerta e impidieron el envenenamiento de la sangre."
Laura Bush agregó que Gus se había convertido en una celebridad local en Frampton Mansell, donde la familia vive.
"Todo el mundo pregunta por él, nos pregunta si somos los dueños del gato que sobrevivió a la caída del viaducto."