Improvisando que es gerundio. Así se mueve en los últimos tiempos el patético Gobierno de Zapatero. Lanza globos sonda sobre ideas improvisadas y cuando caen rayos y truenos de diferentes estratos sociales e institucionales rectifica a toda máquina aduciendo que eso no era lo que pretendían, o que todo ha sido fruto de un malentendido. Les ha pasado con las pensiones, con el retraso de la jubilación, con la Ley de Economía [in]Sostenible, con la subida y bajada de impuestos... Desde luego la segunda legislatura de ZP es para enmarcar en los archivos de la política española como una gran lección de lo que nunca hay que hacer. O por lo menos decir. Muchos pensamos que las decisiones y contradicciones del último Consejo de Ministros --unidas a los pésimos datos económicos que arrastra España, campeona de Europa en destrucción de empleo-- les van a costar muy caro al banquillo socialista en las próximas elecciones. Porque este Ejecutivo da la imagen de un Gobierno a la deriva y sin timón, que hace aguas constantemente, en el que nadie saca cubos para achicarla [porque la tripulación no se pone de acuerdo] y, para colmo, el capitán ZP se escapa a ¿rezar? a Washington con Obama. Todo sea por la foto.
PD: La octava acepción del término Zapatero lo dice todo: «Jugador que se queda sin hacer bazas o tantos. Se quedó zapatero». Pues eso. Sin bazas ni tantos, señor Zapatero.