Un hombre en la oscuridad - Paul Auster

Título: Un hombre en la oscuridadAutor: Paul Auster Editorial: Círculo de Lectores
Traducción: Benito Gómez Ibáñez Año: 2008ISBN: 978-84-672-3253-0Nº de páginas: 215
SINOPSIS: Lee la sinopsis de este libro pinchando AQUÍ
Llevaba tiempo queriendo leer algo de Paul Auster por lo que cuando este año Meg propuso el Reto Paul Auster me apunté sin dudarlo ya que sería de la forma que me obligaría en cierta manera a no dejarlo pasar más. A pesar de tener algunos títulos anotados por las reseñas que en este tiempo he ido leyendo en los diferentes blogs que sigo, decidí seleccionar entre los dos libros que ya tenía en casa: La casa de la luna y Un hombre en la oscuridad, quedándome con este último por ser el que menos páginas tenía y así, si por algún motivo no me gustaba, la lectura no me llevaría mucho tiempo.
Un hombre en la oscuridad tiene por protagonista a August Brill, un periodista ya jubilado y viudo que tras sufrir un accidente de coche reside junto a su hija y su nieta, quienes se ocupan de él. Por las noches, August es incapaz de conciliar el sueño y para pasar el tiempo sin pensar en todo aquello que prefiere olvidar, se cuenta historias a sí mismo. El último de estos relatos es el protagonizado por Owen Brick, un hombre que despierta en un hoyo, en un mundo que no parece ser el suyo, sin saber por qué ha ido a parar ahí. Transcurridas unas horas, Owen descubrirá que Estados Unidos está inmerso en una guerra civil y él ha sido elegido para cumplir una misión que ponga fin a la misma.
Mi primer acercamiento a Paul Auster ha sido positivo, disfrutando con la lectura de esta novelita por lo que no tengo ninguna duda de que repetiré. El comienzo del libro me resultó un tanto desconcertante, la historia de Owen Brick no me entusiasmaba pero a medida que avanzaba e iba descubriendo a August me fue atrapando. Se podría decir que esta obra está dividida en dos historias, una centrada en desarrollar la trama que el propio August está creando en su mente y otra en su propia vida. A mí me ha gustado más la que se desarrolla en torno al propio August, mucho más intimista e introspectiva.
A lo largo de las páginas ambas historias se van entremezclando aunque es fácil distinguir una de otra pues son completamente diferentes y en muchos casos el propio August nos avisa de que va a retomar su novela imaginaria. También el narrador es diferente en cada una pues en un caso es el propio August el que nos habla en primera persona mientras que cuando nos cuenta las aventuras de Owen utiliza la tercera persona. Es una obra que no sigue la típica división por capítulos sino que toda la narración es continua, encontrando únicamente un doble espaciado para avisarnos en algunos casos de que August retoma su propio relato.
El estilo narrativo empleado por Auster es fluido, claro y directo, marcado por un fuerte carácter reflexivo e intimista, siguiendo un ritmo sereno que se mantiene constante y logra absorber al lector desde las primeras páginas. A pesar del desconcierto inicial, me ha gustado el recurso utilizado de introducir una historia dentro de su historia, logrando mantener el interés del lector por ambas y encontrando un punto de fusión entre las dos tramas interesante y convincente.
En mi caso, he disfrutado más con la segunda mitad de la novela, centrada principalmente en el desarrollo del personaje de August y en lo que ha sido su existencia. Es aquí donde nos desvela los principales acontecimientos que han marcado de una manera u otra tanto el curso de su vida como el de su hija y su nieta. Reflexiona sobre diversos aspectos como el divorcio, la infidelidad, el matrimonio, la guerra, el trabajo, la muerte o la enfermedad, indicando como los mismos han influido en las decisiones que han tomado los tres, en sus relaciones familiares y en el transcurso de sus vidas, definiendo su evolución y su estado de ánimo. Es un relato que está marcado por la melancolía y la tristeza, sentimientos que se transmiten al lector que acaba embargado por la misma sensación de pesadumbre que experimenta el narrador. Y es que August es un personaje que sobresale, bien construido, creíble y cercano a la realidad por lo que mientras lees tienes la sensación de que está a tu lado contándotela él mismo y te acabas encariñando con él. Es un hombre que ha tenido momentos felices pero que también ha pasado por otros duros, que ha cometido errores y ha aprendido a través de segundas oportunidades, por lo que en conjunto la evolución de su vida resulta interesante.
En un principio puede parecer que Un hombre en la oscuridad es una obra con un transcurrir pausado, construida a través de recuerdos y reflexiones, pero Paul Auster incluye también un cierto suspense y misterio en torno al pasado de sus personajes y a los traumas sufridos, sorprendiéndonos con un final que consigue impactar al lector y que al menos yo no me esperaba.
Por lo que he podido leer, Un hombre en la oscuridad no se encuentra entre las mejores novelas de Paul Auster, más bien cuenta con alguna crítica negativa pero la verdad es que a mí me ha gustado mucho y sí que la recomendaría. Una novela que se lee con facilidad y resulta amena, encontrándonos en su interior la combinación de una trama ficticia y apocalíptica con otra centrada en la historia familiar de August Brill.

FUENTES: imagen autor aquí

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