Un informe lleva a peticiones de una ley antidopaje en Alemania

Un informe alemán sobre el uso de sustancias prohibidas desde 1950 ha generado una oleada de reacciones y nuevas peticiones de una ley nacional antidopaje.

El informe subraya el dopaje sistemático registrado en muchos deportes durante décadas, recordando al programa de dopaje semiestatal que se dio en Alemania Oriental durante la Guerra Fría.
"Necesitamos una ley de dopaje en este país", dijo Clemens Prokop, responsable de la federación de atletismo, a los periodistas el martes. "También hemos de extender el estatuto que limita el periodo abierto para castigar a los culpables de dopaje para ampliarlo desde los ocho años actuales".
El informe, realizado por el Instituto Federal de Ciencias para el Deporte a petición de la Confederación de Deportes Olímpicos de Alemania (DOSB), fue publicado el lunes bajo presión tras una filtración en los medios el fin de semana después de haber sido mantenido en secreto durante meses.
Describe cómo Alemania Occidental usó y experimentó con el dopaje en el deporte desde los años 50, tanto como su vecino de la Alemania Oriental.
El informe, realizado por la Universidad Humboldt y la de Münster, también plantea cuestiones sobre si algunos futbolistas alemanes tomaban sustancias prohibidas en el Mundial de 1966 en Inglaterra ya que, citando un documento de la FIFA del mismo año, tres jugadores mostraron trazas de efedrina. La efedrina se usaba como descongestionante pero también como estimulante.
El informe se completó en abril, pero su contenido no había sido hecho público oficialmente con anterioridad.
El texto incluye detalles de cómo en torno a los años 70, Alemania Occidental estaba activamente inmersa en experimentar con sustancias que mejoran el rendimiento, como esteroides anabolizantes, testosterona, anfetaminas y EPO, financiados con el dinero del contribuyente.
Las sustancias consideradas de mejora del rendimiento se dieron luego en muchos deportes, dijo. Una controvertida inyección distribuida ampliamente entre los atletas de Alemania del Este durante los Juegos Olímpicos de 1976 fue el primer escándalo de dopaje de la Alemania moderna.
"EFEDRINA"
Los nombres no aparecen en la versión hecha pública el lunes, algo que muchas personas, entre ellos atletas, responsables oficiales y políticos, rechazan.
"Los nombres tienen que aparecer. Son documentos de nuestra época y tienen que ser accesibles al público", dijo Prokop. "La opinión pública exige estar plenamente informada".
El informe dijo que el dopaje no se limitaba a uno o dos deportes, sino que muchos atletas diferentes usaron sustancias prohibidas, y que los futbolistas recibían anfetaminas desde 1949.
Antes e incluso después de que las dos países se reunificaran en 1990, Alemania Oriental era considerada un país que usaba el dopaje desde el Estado durante la Guerra Fría para reforzar su posición en el mundo a través de su éxito en el deporte.
Alemania Occidental, por otra parte, nunca fue sospechosa de dopaje sistemático desde el Estado, sino un país con casos individuales de dopaje.
Aunque buena parte de la investigación se centró en las prácticas de dopaje de la Alemania Oriental, el país reunificado no tuvo prisas en investigar el pasado de dopaje de la Alemania Occidental.
"Lo que me sorprende es que hubo una investigación con lo que obviamente era un dinero estatal y que obviamente muchos responsables de dentro del deporte lo sabían", dijo Prokop.
El excampeón de Europa de salto de altura Carlo Thraenhardt, que compitió para Alemania Occidental en los años 70 y 80, dijo del informe: "Lo primero de todo estoy sorprendido y frustrado de algún modo porque se tiene que combatir el dopaje. Haría mucho más estrictas las sanciones ahora. Al final del día, es corrupción lo que hace esta gente".
"Había rumores", dijo a Reuters TV. "Éramos conscientes de que en la entonces República Democrática Alemana había dopaje generalizado. Todo esto después se confirmó".