Revista Cultura y Ocio

Un lugar a donde ir. 2ª entrega de la serie "Puerto escondido" de María Oruña

Publicado el 27 mayo 2023 por Juancarlos53
Un lugar a donde ir. 2ª entrega de la serie

Paseando hace unas semanas por una Feria del Libro (la de Salamanca concretamente) vi en una caseta la segunda entrega de los libros de Puerto escondido de María Oruña. Recordaba con gusto la lectura de la novela que da título a toda la serie, aunque ya me quedaba algo lejana en el tiempo (año 2018), así que sin pensármelo más la adquirí y la acabo de leer. También he vuelto a leer la reseña que hace ya cinco años hice de Puerto escondido . Gracias a ella el mundo que habitan los personajes junto a la personalidad de éstos y sus evoluciones han revivido en mí y me han servido para leer con más criterio Un lugar a donde ir.

La novela me ha resultado muy entretenida. Me ha gustado volverme a reencontrar con la teniente Redondo y todos los guardias civiles que la rodean en la comandancia santanderina donde trabaja. También me ha gustado esa manera paralela de llevar dos tramas que naturalmente, y tal como sucede en la primera de la serie, confluyen y se funden en una según avanza la narración. Sólo le pondría una pequeña pega: el desarrollo y resolución de la trama me ha parecido algo previsible. El sospechoso máximo se vislumbra con bastante claridad doscientas páginas antes de que la historia concluya. Pero con todo y con eso es una novela interesante en la que se aprenden muchas cosas (de paleontología, de numismática medieval, de venenos naturales, de criminalística, etc.).

Sinopsis (proporcionada por la propia editorial)

Han transcurrido varios meses desde que Suances, un pequeño pueblo de la costa cántabra, fuese testigo de diversos asesinatos que sacudieron a sus habitantes. Sin embargo, cuando ya todo parecía haber vuelto a la normalidad, aparece el cadáver de una joven en La Mota de Trespalacios, que es el lugar donde se encuentran las ruinas de una inusual construcción medieval. Lo más sorprendente del asunto no es que la joven vaya ataviada como una exquisita princesa del medievo, sino el objeto que porta entre sus manos y el extraordinario resultado forense de su autopsia. Cuando hasta los más escépticos empiezan a plantearse un imposible viaje en el tiempo, comienzan a sucederse más asesinatos en la zona, que parecen estar indisolublemente unidos a la muerte de la misteriosa dama medieval. Mientras Valentina Redondo y su equipo investigan los hechos a contrarreloj, Oliver Gordon, ayudado por su viejo amigo de la infancia, el músico Michael Blake, buscará sin descanso el paradero de su hermano Guillermo, desaparecido desde hace ya dos años, y descubrirá que la verdad se dibuja con contornos punzantes e inesperados.

Me ha gustado mucho la estructura que da María Oruña a Un lugar a donde ir: dos historias en paralelo, la búsqueda por parte de Óliver de su hermano Guillermo, y la resolución de los crímenes sucedidos en Suances y Comillas por parte de la teniente Valentina Redondo. Ambas historias avanzan en paralelo, aparentemente independientes, hasta que se mezclan de manera indisoluble.


Al igual que señalé en la reseña de su novela anterior [], todos los personajes están muy bien perfilados y tienen personalidad propia; hasta los agentes Alfonso Zubizarreta y Marta Torres, más planos en la primera entrega, la tienen en ésta. Del grupo más próximo a Valentina Redondo destacan el subteniente Sabandelle, que sigue con sus características de machista y engreído; el sargento Riveiro, siempre muy implicado en su vida familiar con su mujer Ruth e hijos; el capitán Marcos Caruso, exigente donde los haya y muy nervioso por todo lo que de los casos pueda trascender y perjudicarle; el juez Jorge Talavera, etc. Por la parte de Óliver Gordon, pareja ya mucho más consolidada de Valentina, destacaría a Michael Blake, amigo de la infancia que lo ayuda con la gestión de Villa Marina, la casa rural que Oliver tiene allí montada. Fue precisamente la adquisición de esta casa con los sucesos en ella acaecidos, relatados en Puerto escondido, la primera entrega, lo que provocó que él y Valentina se conociesen. En la órbita de Óliver además está Anna Nicholls, su pareja en la anterior novela, que ahora ya sólo aparece en el último cuarto de Un lugar a donde ir aunque teniendo una función más que relevante en el relato; más perdido en la distancia está Guillermo Gordon a quien Óliver busca con denuedo y que sólo al final aparece por sí mismo y no sólo citado como hasta entonces. Imagino que en la siguiente entrega, quizás Guillermo tenga un mayor protagonismo; una razón más para no dejar pasar mucho tiempo por mi parte sin leer Donde fuimos invencibles, la tercera de la serie. Naturalmente categoría aparte y principal tendrían los personajes de esta novela, segunda de las cinco que por ahora componen el grupo de títulos agrupados bajo el rótulo de Puerto escondido, sobre los que se centra la investigación policial: la medievalista Wanda Karsávina y los espeleólogos Arturo Dubach, suizo; Helder Nunes, portugués; Marc Llanes, español catalán; y Paolo Jovis, italiano. Cada uno con sus peculiaridades, pero los cinco con individualidad y personalidades auténticas y muy diferentes.

Un lugar a donde ir. 2ª entrega de la serie
  • "en un claro de la selva, entre vegetación y abruptas piedras calizas y grises, vieron una pequeña pero ancha pasarela de madera que, como un mirador, se extendía al borde de un impresionante abismo. A ellos, que ya habían visto tanto, les hizo enmudecer su belleza. Su tamaño era colosal, majestuoso. La sensación ante el vacío que se abría ante ellos, indescriptible. Habían legado, por fin, al Sótano de las Golondrinas."
  • "Quizás fuesen aquellos viajes en barca con su abuelo curioseando cuevas. O quizás fuese culpa de aquel pintor loco, Karl Wilhelm, que había dejado impresa su huella, su esencia, en aquellos cuadros de la cartuja de San Giacomo, en la mismísima Capri. Hubo un cuadro que lo dejó pasmado, clavado al suelo: [...] Se habían decidido a curiosear dentro de aquel antiguo monasterio, que se había transformado en un edificio basto y decadente que albergaba un desangelado museo. [...] Grotta della Minerva; en él, gaviotas y espuma de mar se revolvían en espiral a la entrada de una gruta marina."

"-Menos mal que se ha levantado la niebla, porque esto parece la ciénaga de los muertos, joder. (dice Riveiro a la Tte. Redondo)

-¡La ciénaga! Pero, bueno, ¿tú no has visto El Señor de los Anillos?"

"-Es verdad, yo vi cómo Batman dejaba a Barbie princesa en el prado.

-¿Batman? -preguntó Torres, mirando a Zubizarreta y volviéndose a inclinar al lado de la niña.

-Sí, no se veía bien, pero yo creo que era Batman. Lo vi de espaldas, cuando vine a la cocina por la noche."

"Benditos sean los muertos buenos y las almas arrepentidas [...].Que el sol de los muertos aplaque los sus tormentos y los sus dolores. Amén.

Oración cántabra dedicada a los muertos"

Un lugar a donde ir. 2ª entrega de la serie
(En la web somosviajeros.com de donde tomo la foto hay un magnífico reportaje sobre esta Cueva cántabra)

Un lugar a donde ir. 2ª entrega de la serie

Volver a la Portada de Logo Paperblog