Tras la polémica que suscitó su última película “Cazafantasmas”, y tras éxitos como “La boda de mi mejor amiga”, Paul Feig nos presenta su último largometraje: “Un pequeño favor”. Tomando la forma de un thriller, y disfrazándose de pura comedieta americana, Feig adapta la exitosa primera novela de Darcey Bell, aunque, lamentablemente, lo hace de manera bastante sosa y típica.
Como acostumbra en su filmografía, Paul Feig nos presenta aquí una nueva comedia de protagonismo femenino, encabezada por Anna Kendrich y Blake Lively. Ambas, probablemente, sean lo más destacado de todo el metraje, en especial una Anna Kendrich en estado de gracia, alocada y divertida. Su personaje, Stephanie, una madre treintañera, viuda y exageradamente preocupadiza y responsable, que en sus ratos libres lleva el mando de un blog con consejos para madres y padres, se ve envuelta en una trilladísima y exagerada historia de misterio. Su nueva mejor amiga, Emily, la madre del mejor amigo de su hijo, una Blake Lively misteriosa y poderosa, desaparece sin dejar rastro, aprovechando la ausencia de su marido, y tras pedir a Stephanie que recoja a su hijo del colegio. A partir de ese momento, comenzará una búsqueda incesante, llena de giros argumentales demenciales, y siempre manteniendo un toque de comedia con bastante poca gracia.
Estamos ante una película que, claramente, no se puede tomar en serio. No son sus cartas. Desde el inicio, todo está impregnado de un tono "feig" bastante predecible. La película tendrá su público, pero no es, que digamos, muy divertida. La dirección tiene el piloto automático puesto, solo destacando, a ratos, la dirección de actores (probablemente el punto más fuerte de su autor). Todo está lleno de planos sosos y repetitivos, que no ayudan a la agilidad del relato. Claramente, se echa de menos un mayor intento por parte de su director, algo de riesgo. Todo suena a muy visto. La incesante música, llena de una selección de canciones, más o menos acertadas, no hacen sino subrayar e intentar animar un poco un relato que se va tornando, a cada momento, más sonrojante.
Casi parece que estemos ante un TV movie mala, de las de Antena 3 por la tarde, pero con la condición de que intenta guiñar el ojo al espectador, como pidiéndole que piense poco y que no se tome muy en serio lo que ve. Y uno lo intenta, pero se hace difícil, porque no es lo suficientemente paródica como para pasar todo lo absurdo por alto. No estamos ante un Aterriza como puedas o un Top Secret. Se agradecen las tres o cuatro sonrisas que consigue sacarte Anna Kendrich, pero, con el avance del metraje, la risa se congela, no por exceso de dramatismo, ni mucho menos, si no por ausencia de gracia.

Cuando la película se mete de lleno en el enredo, y nos va descubriendo los misterios, la risa que surge es más por vergüenza que por méritos de su guion. No conozco el material original del que proviene, pero quiero entrever que no es excesivamente bueno. No sé cuál es el tono de la novela que adapta, no creo, tampoco, que sea muy serio. No puede serlo. Si todo resultase una parodia de las películas de misterio, de desapariciones, quizá hasta podría haber resultado más destacable, pero la película tampoco parece tener ese objetivo. Te tienes que tomar un poco en serio su historia, pero sin tomarte muy en serio la película. El resultado es irritante. Ni divierte, ni interesa, ni hace gracia. Aunque confío en que tendrá un público específico que, probablemente, la encuentre bastante disfrutable.
En realidad, no hay mucho que añadir sobre ella. Es una película tonta, exagerada, que juega a ello y, por lo tanto, no se puede criticar. Es más, es maravilloso cuando uno puede disfrutar de películas tontas y exageradas donde todo funciona. Pero este no es el caso. Al principio uno tiene cierta ilusión. La cosa no empieza mal. Lo de Kendrich promete. Lamentablemente, es difícil mantener sola una película cuando ni el pobre material que la sustenta, ni la dirección, ni el tono, ni nada más de lo que va apareciendo en pantalla, ayuda a ello.

En definitiva, Un pequeño favor es una película bastante floja. Podría decirse incluso que mala. De todos modos, creo que los que busquen algo de desconexión, de cine palomitero con el que pasar un sábado por la tarde tras comprar algunas cosas, o comer en el centro comercial, pueden encontrar la elección de esta película bastante acertada. Incluso, como antes comentaba, aquellos que conecten con el cine de Feig, o con el estilo de comedia que él proclama, puede que se diviertan bastante. Para el resto, creo que la mejor opción es olvidarse de su paso por la cartelera.
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- ##check## Lo bueno
- Una Anna Kendrich totalmente en estado de gracia. Ella sola mantiene casi toda la película.
- ##times## Lo malo
- Historia excesivamente vista y trillada. Las resoluciones y los giros de guion son bastante exagerados y pobres. Además, es bastante sosa.
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- Ambientación 4.5
- Ambientación bastante normal, incluso poco llamativa. Va con el tono de la película, pero es bastante poco destacable.
- Desarrollo de Personajes 3.5
- Aunque el desarrollo del personaje de Anna Kendrich pueda tener su gracia, la verdad que se acaba haciendo predecible y exagerado. Del mismo modo pasa con el resto. Todos tienen desarrollo, pero no es que digamos el más acertado.
- Argumento / Guión 2.0
- La parte final de la película se torna totalmente absurda y risible. Lo giros de guion son bastante malos, aparte de que todo se sostiene sobre una historia pobre y repetitiva.
- Banda Sonora 4.5
- Banda sonora efectista. Quizá funcione, pero aporta más bien poco, y ya es demasiado recurrente en este estilo de películas.
- Entretenimiento 6.5
- Seguramente tenga un público muy objetivo que disfrute bastante de la película. Al fin y al cabo, y visto lo visto, no puede tener otro objetivo que ese.
- Montaje / Innovación técnica 3.5
- Nada que destacar. Muy poca innovación. Además, la película visual y narrativamente se hace bastante floja y predecible.
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- Puntuación Total 4.5 / 10




Trailer:
Fuente Imágenes: EOne Films
