Termina el mes de Junio. Todavía me quedan un par de semanas de viajes y sesiones, pero llega el momento de descansar.
Sol, playa, helados, bañadores, flotadores, río, montaña, chanclas, toallas, siesta, gafas de sol y de bucear, viajes, tabla de surf, horchata, bronceador, gazpacho, cangrejos, paella, mapas, cubos, palas, castillos de arena... Todo esto sin duda son palabras que nos anclan a estas fechas, pero también es cierto, que son fechas con menos preocupaciones, con más tiempo libre y con más posibilidades de marcarnos metas que nos ayuden a dar pasos en nuestra mejora como personas.
Dicen que San Juan XXIII escribió esto hace años, y creo que puede ser una magnífica guía para mejorar un poco cada uno de estos próximos 71 días hasta que nos volvamos a encontrar allá por principios de septiembre.
1. Sólo por hoy trataré de vivir exclusivamente el día; sin querer resolver todos los problemas de mi vida de un golpe.
2. Sólo por hoy tendré el máximo cuidado de mi aspecto, mis maneras y mis formas. No criticaré a nadie ni trataré de hacerle mejorar, salvo a mí mismo.
3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad, no sólo en el otro mundo sino también en este.
4. Sólo por hoy me adaptaré a las circunstancias, sin pretender que las circunstancias se adapten a mis deseos.
5. Sólo por hoy dedicaré 10 minutos a una buena lectura, recordando que, como el alimento es necesario para el cuerpo, la lectura lo es para el alma.
6. Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.
7. Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer.
8. Sólo por hoy me haré un horario detallado del día. Quizá no lo cumpliré del todo, pero lo redactaré y evitaré en él las prisas y la indecisión.
9. Sólo por hoy creeré, aunque las circunstancias demuestren lo contrario, que la providencia de Dios se ocupa de mí como si nadie más existiera en el mundo.
10. Sólo hoy por no tendré temores, especialmente a gozar de lo que es bello y bondadoso.
¡Anda que no tenemos trabajo para este verano!