Un road trip peculiar

¡¡¡Hola Laberinter@s!!!
¿Qué tal todo? Espero que todo os vaya bien tanto en los estudios como en el trabajo. A mi personalmente me va bien aunque estoy un poco ocupada porque estoy con mi TFG, es decir, con el trabajo de fin de grado y la verdad me quita mucho tiempo.
Hoy os traigo una reseña de un libro que leí hace poco y que espero que os guste mucho la reseña.
Ficha Técnica
Título: First Love. Nada que perder
Autor: James Patterson y Emily Raymon
Editorial: LaGalera
Encuadernación: Tapa blanda con solapas
Páginas: 320
P.V.P: 16,95 €
Continuación: No, es un libro autoconclusivo.
Sinopsis:
Amy quiere salir del pueblo, quiere dejarlo todo atrás y le propone a su amigo Robinson echarse a la carretera y viajar, sin planear nada, sin rumbo. El viaje es un salto hacia lo desconocido cargado de emociones: la emoción de sentirse libre, la emoción de transgredir la ley, la emoción de cruzar la última barrera que separa que la amistad del amor...
El viaje es la gran escapada, pero hay cosas de las que no es posible escapar.
Opinión Personal
Desde que empezara a ver por la blogosfera, por Instagram y por las demás redes sociales imágenes y post sobre este libro me picaba la curiosidad por eso no dudé en pedirle a laGalera un ejemplar, quienes muy amablemente me lo enviaron, y tan pronto me llegó me puse manos a la obra con ella.
En "First Love" conocemos a Amy, una chica "perfecta" que de buenas a primeras se junta con su amigo Robinson y los dos se dedican a recorrer diferentes partes de Estados Unidos, pero la vida sigue su curso y ese viaje que parece tan fantástico se verá envuelto en un mar de problemas que a veces no tienen solición.
Amy es una chica 10, una típica chica buena que saca buenas notas y que de rebelde no tiene un pelo. Aun así un día decide olvidarse de toda su vida anterior y irse de viaje con su amigo. Durante ese viaje vemos que ella es la sensata que es la que se preocupa por todo y que pocas veces se deja llevar, porque normalmente tiene el angelito en el hombro diciéndole que cada paso que da en esta aventura está mal. Realmente durante la novela su personaje que hace, por veces, cansino ya que desde el minuto uno sabemos lo que siente por Robinson y en muchos casos tenía ganas de darle un sopapo para que espabilase. Lo que más me gusta de ella es que es una lectora empedernida y que cada página de la novela está llena de frases sobre libros.
Robison, por la contra, es el típico chico guapo y malote que cuando te mira te desarma y haces todo lo que él quiere. Por esa condición de malote, es el que pone la parte divertida y peligrosa de la aventura y con el que más disfrutamos. Durante la novela vemos su parte más carismática y extrovertida pero también vemos una parte oscura y reservada de su personalidad. Durante la novela hay partes poco creíbles de él y no me gusta mucho cuando fuerza demasiado a Amy para que haga cosas peligrosas. Al mismo tiempo me gusta que tenga esa parte tan salvaje y también me gusta su evolución, ya que en un principio es reservado y no le cuenta nada a Amy sobre si mismo pero poco a poco vemos como se vuelve más sensato y se va abriendo más a su amiga contándole aspectos de su vida que hasta ahora ella desconocía.
 La novela, siendo absolutamente sincera, no es nada del otro mundo, con esto no quiero decir que no me gustase, porque me gustó pero es una novela típica que te sirve como descanso entre novelas y que se pone interesante hacía el final, cuando ya solo te quedan unas pocas páginas para terminar.
Por todo lo anteriormente dicho, mi puntuación para esta novela es: