Kayla Sinclair sabe que se ha metido en un buen lío cuando casi se queda sin un duro por comprar en una subasta el retrato a tamaño natural de un misterioso individuo que vivió en el siglo XIX.Kayla tiene una vida perfecta. Su trabajo es perfecto, su prometido es perfecto y no hay nada que la haga dudar de esto o al menos eso era hasta que entró a una galería de arte y posó sus ojos en el cuadro de un joven galante que parecía que le sonreía sólo a ella. Kayla vuelve una y otra vez a la galería para mirar al apuesto joven un día casi sin saberlo compra en una subasta el cuadro. Su prometido no está muy feliz con ello e ínsita a la joven a vender el cuadro pero ella se niega y termina rompiendo su compromiso.
Jago Kerswell, tabernero y contrabandista, sabe que esos momentos robados con lady Eliza Marcombe entrañan peligro, pero se arriesgará con tal de estar con ella. La maldición de una gitana caerá sobre la pareja y le permitirá, dos siglos después, llegar hasta Kayla.
¿Conseguirá ella resolver lo sucedido en el pasado? ¿Y lo que se le viene encima?
Kayla se sentiría desanimado por eso pero una noche el cuadro le habla y le cuenta una historia que alejará de su mente todo lo relacionado con la cancelada boda y la empujará a la vida de otro hombre que la hará sentir como nunca se había sentido.
Se había prometido que la esperaría una eternidad si hacía falta, asumiendo que la espera sería recompensada. Pero pasaron años y siglos y no se veía un final, por lo que él empezó a desesperarse. Dudaba. ¿Volverían alguna vez a estar juntos?
Iba y venía de la oscuridad que le mantenía cautivo, a veces consciente de las cosas que pasaban a su alrededor, a veces solo escuchando lo que sucedía. Se daba cuenta de cómo el mundo estaba cambiando, evolucionando en una sociedad mucho más tolerante que aquella en la que él había vivido. Eso le daba esperanza, pero también le entristecía. Ojalá las cosas hubieran sido así cuando él vivía.
La esencia de madreselva y rosas le sacudió de repente y le sacó de las sombras. Entonces miró a la mujer que permanecía de pie frente a él, mirándole con mucha atención.
Este libro esta contado a dos tiempos. Al inicio de cada capítulo tenemos a Jago (el joven en el cuadro) contándonos poco a poquito su historia y también tenemos a Kayla en el presente tratando de encontrar el otro cuadro que unirá a Jago con su alma gemela.
Al principio del libro pensé que esta iba a ser una novela tipo “Amante de ensueño” de la diosa autora y que Jago iba a salir del cuadro o algo así, pero para mi sorpresa eso no ocurrió sino que aparece otro personaje que será el que ponga patas arriba la vida de nuestra protagonista. Un personaje que también lleva la voz cantante en la narración y que gracias a él conocemos más detalles de la historia.
También pensaba que este libro iba ser completamente de amor, pero aunque el amor está muy presente el tema principal termina siendo el “secreto” de Jago o al menos a mí me emociono muchísimo más descubrir por fin toda la historia del contrabandista. Y al final siento que la historia de Jago opaco la historia de Kayla en el presente.
—De acuerdo, ¿queda en dieciocho mil? Adjudicada por… —el hombre esperó unos minutos más—… dieciocho mil libras. —El martillo descendió con un crack, lo que hizo que Kayla diera un salto incluso aunque lo vio venir. El corazón le latía tan fuete que pensó que, en cualquier momento, se le saldría del pecho. Consciente de ello, levantó su paleta—. Para el comprador número quinientos dieciséis.Kayla cerró los ojos y respiró rápidamente, pues el pánico la asaltaba desde todas las direcciones. «Oh, Dios, ¿qué he hecho?» ¿Cómo iba a explicarlo? ¿Cómo pagaría aquel cuadro?»
Dieciocho mil libras. Esa cifra superaba al menos en tres mil lo que ella podía permitirse. No había vuelta atrás, su puja había sido aceptada.
La autora nos regala una historia de amor en el presente y pasado que tendrá elementos para todos los gustos y el ritmo con el que las maneja es muy bueno, ni muy acelerado ni muy lento y sus personajes son bien definidos y variopintos.
Creo que de lo único que puedo quejarme es que al final esperaba un cierre más perfecto para Jago y no sólo un “Gracias”. Fuera de eso puedo decirles que si buscan una buena historia de amor no totalmente rosa, esta es su novela.
Creo que he sido muy vaga a la hora de hablar de esta historia y de sus personajes, pero yo disfrute mucho ir conociendo poco a poco todo y no me atrevo a contarles de más y arruinarles las sorpresas que esconde el libro.