Un sí pero no…

La imputación de los ex presidentes de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, no ha cogido a nadie por sorpresa, al revés, era algo muy esperado tras los escándalos de corrupción en los que se ha visto involucrada la administración andaluza.
Y siendo algo tan previsible y esperado el Partido Socialista Obrero “Español” debería haber preparado su respuesta de una forma más eficaz, pues esta, su respuesta, ha dejado mucho que desear. Pero bueno, ese es su problema. El caso es que los socialistas están en un “sí pero no”, vamos, que no saben qué hacer, porque han sido muchas las veces que han exigido la dimisión de políticos de partidos contrarios cuando han sido imputados. Y cuando Chaves y Griñán fueron “pre-imputados”, la propia Sra. Díaz dijo que en el momento en el que fueran imputados por el Tribunal Supremo deberían dejar su escaño. Y además resulta que el propio Pedro Sánchez, según la versión oficial, ha cesado a la dirección del PSOE en Madrid por supuesta relación con un caso de corrupción de su secretario general, Tomás Gómez, como hemos comentando estos días. Y si cesan a un cargo elegido por los afiliados por relación con un caso de corrupción, sin haber sido imputado ni acusado, ¿por qué no se actúa igual con Chaves y Griñán?, y siguiendo esa misma teoría con Susana Díaz. Este es el sinsentido de los socialistas, que a día de hoy no se sabe cómo van a actuar. Estos sí que tienen un guirigay, y como no lo solucionen pronto van a ser castigados por los ciudadanos en las próximas elecciones. Pero no solo en este tema están perdidos, ayer se publicaba en prensa que el PSOE ha permitido a los socialistas en Baleares pactar con Podemos tras las elecciones municipales y autonómicas, ¿harán lo mismo en Andalucía?, porque con los de Izquierda Unida lo tienen complicado… Y es que los socialistas están como la canción, en un sí pero no, un no pero sí…