Un siglo de oportunidades perdidas.

El presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas,

Esta semana conmemoramos 100 años de la Declaración Balfour, que reconoció oficialmente el derecho del pueblo judío a un hogar nacional en la tierra de Israel. Mucho es lo que ha ocurrido durante este siglo; el pueblo judío ha sufrido terribles tragedias pero también ha sido lo suficientemente sabio como para utilizar todas las herramientas a su disposición para realizar su sueño de autodeterminación, creando un próspero país.

Durante los mismos 100 años, señor presidente, usted y otros líderes palestinos nunca perdieron la oportunidad de perder la oportunidad. Una y otra vez se le requirió tomar decisiones históricas y valientes, y una y otra vez rechazaron tajantemente la mano tendida en paz. Siempre han tenido buenas excusas, pero muy pocas buenas obras que acompañarlas.

En el último año, han elegido otro camino, uno que niega por completo la realidad al centrarse en los intentos de negar la existencia eterna del Estado de Israel. En lugar de reconocer el hecho de que Israel está aquí para quedarse, usted y los suyos han decidido retroceder un siglo y tratar de cambiar la historia.

Han trepado un árbol imaginario, exigiendo al gobierno británico que se disculpe por emitir la Declaración Balfour, luego trataron de alistar a los países árabes para presentar una demanda de indemnización contra el gobierno británico, y luego incluso exigieron que se derogara la Declaración Balfour.

¿En qué planeta está, señor presidente? Sus demandas solo demuestran a alguien que todavía necesita tal prueba, que no es consciente de las verdades históricas y que cree que los hechos históricos son flexibles y pueden manipularse a voluntad.

Su audiencia debe preguntarse, si así es como trata los documentos históricos vinculantes, ¿cómo puede alguien esperar que cumpla con un acuerdo firmado? Con sus acciones, ha cimentado la idea de que no respeta ningún contrato.

Sr. Presidente, al pedir la derogación de la Declaración Balfour, está tratando de negar el hogar nacional del pueblo judío mientras fomenta entre su público la ilusión de que si esperan el tiempo suficiente, el Estado de Israel dejará de existir. Lo siento, pero este esfuerzo también terminará sacrificando el futuro del pueblo palestino por un giro de relaciones públicas barato, y lo sabe. Sabe que sus demandas son sueños que nunca se harán realidad. Como diplomático con más de 30 años de experiencia, también debo advertirle: no se deje confundir por el apoyo internacional que recibe por vender ilusiones.

Es cierto que desde el 29 de noviembre de 1947, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas votó el plan de partición, la ONU y las agencias internacionales han estado ayudando a los palestinos en su lucha contra Israel y su mayoría automática en organismos internacionales le permite aprobar casi todas las -resoluciónes anti israelí, pero esto le ha llevado a desarrollar una idea falsa de que, con un poco más de esfuerzo, podrán borrar a Israel del mapa.

Pero quién mejor que usted sabe que todo esto son ilusiones, y que una y otra vez colisionan con la realidad porque usted, y el resto del mundo, saben que el Estado de Israel es un fait accompli, un miembro productivo y significativo de la comunidad internacional .

Sr. Presidente, ha pasado de ser un líder de una organización terrorista a ser el líder de la Autoridad Palestina, un puesto que ha mantenido durante 15 años a pesar de las diversas dificultades. Una y otra vez usted establece a los líderes israelíes opuestos y ha visto hasta dónde están dispuestos a llegar. Una y otra vez usted ha sido testigo de cómo el Estado de Israel hace concesiones por la paz, mientras que usted no estuvo a la altura de las circunstancias y tomó decisiones valientes.

Ahora, señor, debe mostrar liderazgo. Debe asumir la responsabilidad y retirarse del negocio de vender ilusiones. No confunda al pueblo palestino con ilusiones de borrar la historia; no los anime con la esperanza de construir un futuro sobre esta base; no los irrite con lo que una vez fue, sino ayúdelos a aspirar a lo que podría ser.

Un siglo de oportunidades perdidas es suficiente, señor. No condene a tu pueblo a 100 años de soledad también.

Ron Prosor es el jefe de la Cátedra Abba Eban de Diplomacia Internacional en el Centro Interdisciplinario Herzliya y ex embajador de Israel ante la ONU

Fuente: Israel Hayom